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jueves, 28 de septiembre de 2017

FELICES 126 AÑOS GLORIOSO PEÑAROL



Una vez más nos encontramos hoy delante de esta pantalla con la difícil tarea de escribir sobre el sentimiento que nos invade en un nuevo aniversario de Peñarol. Cada año se nos hace más difícil expresar con palabras ese sentir. No hay adjetivo que permita calibrar la intensidad de esta emoción. Felicidad, orgullo, satisfacción, complacencia, alegría, nada lo refleja por sí mismo y es un cúmulo de todo eso.

El recuerdo de los momentos vividos, de los campeonatos ganados, de los goles inolvidables, de los triunfos memorables, de los partidos únicos, se mezcla también con el recuerdo de las personas que ya no están, de mis viejos. De mi padre a quien aun estando en una silla de ruedas vi casi levantarse sobre sus piernas para gritar un gol o de mi madre quien se preocupaba por lo nervioso que yo me ponía en cada partido y me quería dar un calmante que me evitara la intranquilidad. Recuerdos que hoy me llenan de orgullo y de emoción cuando ya estoy cerca de los 50.

Tuve la suerte de ver a Peñarol campeón de América y del Mundo y ni siquiera eso alcanza para expresar todo lo que Peñarol es en mi vida. Es el grito de gol con los puños apretados, es el llanto que pugna por escapar y rodar por las mejillas, es el abrazo con ese desconocido de la tribuna y que sin embargo, es un hermano.

Es también el enojo cuando las cosas no salen, la bronca ante una meta no conseguida, la preocupación ante un rendimiento que no es el que esperamos. Pero cuando las cosas van mal, es cuando más aurinegros nos sentimos. Es cuando nuestra fé se redobla, cuando el temple se hace mas firme, cuando la identificación con los colores se hace más intensa. Porque el hincha de Peñarol está más allá de un gol, de un resultado, de un campeonato.

Es ese sentimiento indescriptible cuando vemos el amarillo y negro saliendo de un túnel hacia la arena de la gloria. Es eso que ante cada partido nos hace sentir que nada puede vencernos y que seremos campeones de todo. Ese sentimiento irracional, rayano en el fanatismo, que no sabe de flaquezas, de dudas, ni de claudicaciones.

Desde que escribo este blog, donde no pretendo que me lea más nadie que yo mismo, cada año he buscado una forma de reflejar lo especial que es este día. He hablado de la fundación. He imaginado lo que sería retrotraerse a aquella tarde-noche del 28 de setiembre de 1891. He dado un panorama de lo que era el Uruguay en esa época. Y hoy, de nuevo me encuentro ante esta tarea.

Quienes nos fundaron hace 126 años un día como hoy, no podían saber lo que estaban poniendo en movimiento. No podían imaginar en pleno siglo XIX que esa modesta institución que no pretendía ser más que un vehículo recreativo para los empleados de una empresa escondida en un recoveco de América, sería un día un gigante deportivo que recorrería el mundo cubriéndose de gloria. No podían saberlo, no. No podían pero alguien lo imaginó. Alguien más osado, más visionario, más confiado, dejaría una sentencia escrita en papel en el acta misma de fundación. “SERÁS ETERNO COMO EL TIEMPO Y FLORECERÁS EN CADA PRIMAVERA”.

En esa sentencia quedó reflejado el espíritu que nos hace únicos. Un mandato que viene desde el origen y se mantiene incólume 126 años después. Aquella institución nacida de la amalgama de la nostalgia inglesa y la enjundia criolla, conquistaría el Uruguay, América y el mundo. Ese Peñarol glorioso, legendario, vital, es el que cada fin de semana nos hace creer por 90 minutos que nada es imposible.

Ese Peñarol celebra hoy su aniversario. Con él todos sus jugadores, hinchas, dirigentes, técnicos y funcionarios, pasados y presentes levantamos nuestra copa para brindar por el momento más sagrado de nuestra religión aurinegra.

FELICES 126 AÑOS LEGENDARIO PEÑAROL!

domingo, 17 de septiembre de 2017

Ahora la conocen. Peñarol 2 Nacional 0



Peñarol y Ramos en particular, se jugaban mucho en este clásico, de eso no hay dudas. Pero más allá de la manija de la prensa, quien más necesitado estaba del triunfo era del tradicional rival, porque de no obtenerla, quedaba atrás en la tabla del clausura y en la anual. Y más allá de las “rachas” lo importante es la estrategia del campeonato y ser inteligente a la hora de planear la hoja de ruta del torneo.

Ramos eligió colocar un equipo ultra ofensivo, quitando a Guzmán Pereira de medio, el único volante con vocación de marca, para armar un doble cinco con el cebolla Rodríguez y Gargano, con Estoyanoff y Rossi como volantes externos y Maxi Rodríguez como enlace para abastecer a Viatri en función de centro delantero.

Poca marca en el medio para una zona donde en Nacional estaban Porras, Álvaro González y Sebastián Rodríguez. De quien prevaleciera, si el buen pie de Peñarol o la marca de Nacional, iba depender gran parte del resultado del partido.

Enfrente un rival que tiene mejor equipo que el nuestro y no hay que temer reconocerlo. Es un equipo que ha venido trabajando junto desde hace dos temporadas y más allá de que perdió algunas piezas, tiene muchísimo más tiempo de trabajo que un Peñarol para quien el cambio ha sido constante y recién ahora parece ir estabilizando una formación titular.

Con la precaución del arbitraje de Ferreyra de pésimo recuerdo para los hinchas aurinegros convalidando un gol con la mano de Sebastián Rodríguez sobre el cierre de partido e inventado una falta del hormiga Valdez pasada la hora que terminó en gol en una de las injusticias más recordadas por los carboneros (y eso que han sido unas cuantas en los últimos años). A eso hay que sumar algún otro partido donde el tradicional adversario fue favorecido por este árbitro.

Arrancó mejor el tricolor y tuvo un par de chances en los primeros minutos. Ya a los 5´ se va Aguirre por izquierda con sombrero incluido, va hasta el fondo, mete la pelota al medio y llega solo por el medio Sebastián Fernández pero le pega muy de abajo y la manda lejos por encima del horizontal.

Un minuto después un remate desde afuera del área de Sebastián Rodríguez que pasa también arriba del travesaño.

Peñarol mejoraba después de los 15´ pero a los 19´ otra vez se le queman los papeles a Ferreyra como siempre, en contra del aurinegro. Un centro desde la izquierda del lolo, toque de Maxi Rodríguez y salta con la mano Espino dentro del área. Penal claro, evidente, notorio, pero Ferreyra no cobra nada. Parece que para él, los jugadores de Nacional pueden jugar con la mano en los clásicos y no pasa nada.

Para peor a los 32´ cobra una falta que no es y amonesta mal a Arias que saca la pelota y quedan discutiendo Polenta y Estoyanoff por una jugada anterior y son expulsados ambos. De las expulsiones poco podemos decir, no sabemos que se dijeron los jugadores, pero Arias es amonestado por una jugada donde ni siquiera comete falta sino que despeja bien la pelota.

El primer tiempo se fue sin que Peñarol haya rematado al arco pero de nuevo perjudicado con un clarísimo penal no sancionado. Seguimos sin entender qué es lo que hace la delegación de Peñarol en la AUF donde nos siguen poniendo árbitros que permanentemente nos perjudican y nos cercenan posibilidades legítimas.

En el segundo tiempo mejoró Peñarol tal como ha sucedido en todos los partidos de este campeonato. Desde los primeros minutos se mostró más ofensivo y volcó el juego sobre el campo tricolor que quedó jugado a una opción de contragolpe (y tuvo las suyas).

Ya al minuto de juego una pelota al área, toca Viatri de cabeza, cabecea también Rossi y la pelota le queda a Maxi Rodríguez que toca la pelota y se pierde apenas afuera contra el palo derecho.

Un minuto después sube Varela por izquierda, se mete al medio y saca el zapatazo que se pierde apenas afuera contra el palo derecho de Conde que volaba pero no llegaba.

Sobre los 9´ tuvo Nacional una de esas claras de contragolpe que esperaba. Se va en velocidad Viudez, entra por izquierda, mete al medio y una pelota entreverada que consigue tocar de taco Aguirre hacia el arco, supera a Dawson y Arias hace un impresionante esfuerzo para despejar sobre la línea. Una jugada que vale como un gol.

A los 13´ un tiro libre frontal de Hernández y cabecea Viatri y la pelota pasa apenas afuera contra el palo izquierdo de Conde que no llegaba.

Sobre los 17´ otro centro al área tricolor, el despeje de la defensa y de primera Maxi Rodríguez saca el remate que se pierde apenas afuera contra el palo izquierdo.

Peñarol era más y merecía ponerse en ventaja pero quedaba expuesto a un acierto rival en contra y casi se da a los 19´ cuando avanza Viudez por el medio y saca el remate que pega en la base del palo izquierdo de Dawson que quedaba parado. Pudo ser para Nacional y por fortuna, no fue.

A los 22´ otro tiro libre frontal de Hernández en forma de centro y quien gana de cabeza es el cachila Arias y otra vez la pelota se va apenas afuera contra el palo izquierdo.

La jugada capital se da a los 27´. Un centro desde la izquierda, lucha la pelota Gastón Rodríguez que había ingresado, toca atrás para Viatri que intenta y la pelota deriva para Maximiliano Rodríguez que saca el remate que pega en la mano de Rogel. Penal que esta vez no pudo dejar de cobrar Ferreyra pero no expulsó a Rogel por segunda amarilla como era de orden.

El penal lo remata el cebolla Rodríguez, fuerte, arriba, inclinado sobre el palo derecho y supera la estirada de Conde que se tira bien pero no puede detener la pelota. Peñarol 1 a 0 y era justo con el trámite a pesar de que las dos más claras las tuvo Nacional.

De ahí en más siguió siendo superior el carbonero. Cerró filas, tuvo la pelota, la hizo correr, jugó con la desesperación del rival e intentó aprovechar alguna oportunidad.

Esa oportunidad llegó a los 39´ cuando sale Guzmán por el medio, la manda a la derecha para la subida de Corujo que también había entrado y el chiche mete el centro bajo al medio, la pelota supera a Conde y cuando llegaba por el segundo palo Gastón Rodríguez, se arroja Rogel para cerrar y termina metiendo la pelota en el arco. Justicia poética para un jugador que debió ser expulsado y siguió en el campo para hacerse un gol en contra.

Ganó Peñarol y se sacó una espina grande. No hay que tener temor de decirlo. Fue una victoria muy importante. Era un encuentro que se debía ganar para conjurar todos los fantasmas y además se ganó siendo perjudicados una vez más por el arbitraje. Hoy que es un día de triunfo, de festejo, de descargar el grito contenido hay que decirlo más fuerte que nunca: Peñarol fue perjudicado por un arbitraje clásico, otra vez.

En la semana, buena parte de los medios se pasaron remarcando cuántos jugadores de Nacional no conocían la derrota clásica. Hoy los jugadores de Peñarol se la acaban de presentar.

sábado, 9 de septiembre de 2017

Cuatro por cuatro. Peñarol 2 Wanderers 0



Peñarol enfrentaba a Wanderers en el Campeón del Siglo como antesala del clásico y Ramos decidió mantener al mismo equipo que derrotó a Boston River con la excepción del suspendido Lucas Hernández, suplantado por el juvenil Piriz. Mantuvo a Rossi y Estoyanoff en el equipo titular dejando en el banco a los seleccionados el chiche Corujo y el cebolla Rodríguez.

Enfrente estará Wanderers, un equipo que siempre nos complica aunque no empezó bien el clausura, estaba cuarto en la tabla anual con intenciones de descontarle puntos al aurinegro.

Peñarol arrancó bien, presionando, jugando en campo contrario e intentando abrir la cancha pero sin generar la chance clara de gol, más allá de una pared interesante entre Maxi Rodríguez y Rossi que termina con un remate de éste, trabado al córner.

La primera es para Wanderers a los 9´ con un envío desde la derecha para la entrada de Rivero por el segundo palo que saca el remate que se va elevado por encima del horizontal.

Una más para el bohemio a los 16´ otra vez por intermedio de Rivero que, esta vez desde la derecha, saca un remate desde afuera, a media altura que pasa cerca del palo derecho de un Dawson que volaba para cubrir.

Peñarol responde a los 21´ con un tiro libre de Estoyanoff desde la izquierda y esta vez es el arquero Rodríguez quien vuela para despejar contra el palo derecho.

Sobre los 26´ una pelota que baja Viatri atrás para Maxi Rodríguez que saca el remate que es trabado y sale hacia el arco, obligando al arquero a estirarse para mandar el córner por encima del horizontal.

Otra para Wanderers a los 29´ y de nuevo de Rivero con otro remate desde afuera que contiene muy bien Dawson en dos tiempos en buena atajada contra su palo derecho.

Sobre los 35´ un centro desde la derecha del lolo, la baja Maxi Rodríguez de pecho dentro del área, se acomoda y saca el remate cruzado que pasa cerca de palo derecho.

La última de aurinegro fue a los 39´ con una pelota metida por Gargano al área, entra solo Estoyanoff a la espalda de la defensa bohemia y saca el remate cruzado sin dejar que la pelota toque el piso, que se pierde apenas afuera contra el palo derecho.

Otro primer tiempo 0 a 0 (le cuesta mucho convertir al aurinegro en los primeros tiempos) pero con un Peñarol superior en líneas generales que como contrasentido, vio como las opciones de convertir más claras las tuvo el rival.

En el segundo tiempo Peñarol ingresó arrollador. Con la entrada del cebolla por Guzmán Pereira, metió a Wanderers en su campo y el bohemio no pudo salir de su zona. Así y todo, no fueron tantas las chances de gol.

La primera a los 13´ a través de un tiro libre de Estoyanoff que saca bien el arquero Rodríguez con las dos manos.

El gol llega a los 16´con un córner desde la derecha que saca rápido y corto Estoyanoff para el cebolla Rodríguez que se mete en el área y saca el remate fuerte que se termina clavando contra la base del palo derecho de Rodríguez.

Ese gol debió traer tranquilidad al aurinegro pero quizás lo tranquilizó en demasía, porque si bien siguió dominando el juego, controlando la pelota y no sufrió atrás,  perdió el empuje que traía y al no cerrarlo con un segundo tanto, quedó expuesto a un acierto del rival o un error propio.

No se dieron situaciones de gol hasta el final, porque Wanderers no tuvo peso a pesar de los cambios y apenas si llego con algún remate lejano que no tuvo buena dirección o que murió en las manos de Dawson y porque Peñarol no supo hilvanar una contra hasta el cierre mismo del encuentro.

Se jugaban los descuentos cuando Gargano toma una pelota en campo mirasol y manda el pase largo para la entrada en velocidad de Palacios que le gana bien a sus marcadores, entra por derecha al área y en carrera, saca el remate seco, cruzado, que se clava abajo contra el palo derecho entrando por el mismo lugar que en el primer gol.

Peñarol cierra su apronte clásico con otra victoria importante y la cuarta al hilo por primera vez en esta temporada. Ahora será el rival de todas las horas, con una historia que en los últimos tiempos no nos ha sido favorable, llegando con ventaja en la tabla del clausura pero sin poder dejar puntos.

Peñarol arrancó el clausura mejor de lo que podíamos esperar y ahora tendrá una prueba de fuego ante el tradicional adversario, pero ese será motivo de otra historia.

domingo, 3 de septiembre de 2017

La cuarta fue la vencida. Peñarol 1 Boston River 0



Peñarol defendía la punta en exclusiva del Clausura (único medio para pelear el campeonato) ante un equipo al que no le habíamos podido ganar desde que llegó a primera división. Habían pasado tres partidos 0 a 0. Un equipo que maneja bien la pelota, que está bien trabajado por Apud, un técnico que ha mostrado credenciales en los equipos que ha conducido.

Con otra baja confirmada (continua el absurdo de que siguen yéndose jugadores con el campeonato empezado) que es la salida de Albarracín a España, Ramos no podía contar con los seleccionados cebolla Rodríguez y el chiche Corujo, suplantados por Rossi y el lolo Estoyanoff. Decisión de Ramos de usar dos delanteros como mediocampistas externos apostando a su velocidad y habilidad.

Y el encuentro fue interesante desde el principio, agradable de ver, con buen toque de pelota de ambos y no tan cerrado como estamos acostumbrados a ver a los rivales aurinegros.

Antes del minuto pudo abrir la cuenta Peñarol con un notable cruce de Rossi desde la derecha para la entrada de Estoyanoff por izquierda, quien ingresa al área y saca el remate cruzado que rechaza el ex arquero aurinegro Adrián Berbia.

La más clara del mirasol fue una doble opción a los 26´, cuando luego de un despeje defectuoso de la defensa de Boston River, la pelota sale hacia atrás y le queda a Maxi Rodríguez que mete un toque sutil por encima de la salida de Berbia y cuando la pelota ingresaba en el arco la despeja sobre la línea otro ex aurinegro, Federico Rodríguez. Pero la jugada sigue y luego de un cabezazo le vuelve a quedar a Maxi Rodríguez y su toque pega en el travesaño. Sin dudas la más clara y por dos veces le faltó fortuna al argentino para marcar su tercer tanto con la camiseta aurinegra.

Lo más cercano de Boston fue a los 38´ con un tiro libre de Flores que pasa cerca del caño derecho de Dawson que controlaba su sector.

Fue 0 a 0 el primer tiempo (el tercero para Peñarol en igual cantidad de juegos) pero el partido fue mucho más entretenido y Peñarol no lo jugó mal ante un rival que, por fin, se dedicó más a proponer que a destruir.

El segundo tiempo fue tan bueno y entretenido como el primero y Peñarol fue superior aunque le costó reflejarlo en el marcador.

La primera para el aurinegro fue a los 13´ y volvió a ser una doble ocasión en una. Jugada por izquierda de Rossi, pelota al área que deriva para Maxi Rodríguez que saca otro zapatazo que revienta nuevamente el travesaño, el rebote lo toma Estoyanoff de frente al arco y saca el remate que despeja Berbia con las piernas en notable atajada. Parecía que la pelota no quería entrar.

Pero un minuto después, a los 14´ finalmente se abrió el arco. Una impresionante apilada de Rossi, que toma la pelota por derecha, hace la diagonal hacia el medio, se va a tres defensas, un cuarto se resbala y permite que el juvenil enfrente al arquero y toque por encima de su cuerpo para marcar el que terminaría siendo el tanto de la victoria. Un golazo de Peñarol y un golazo de Rossi venido de las formativas.

Y en los minutos siguientes lo pudo y lo debió liquidar el aurinegro. A los 19´ un tiro libre de Hernández desde la izquierda, el centro y salta solo Arias para meter el cabezazo que Berbia consigue contener abajo cuando debió ser el segundo gol mirasol.

Sobre los 23´ se da una jugada curiosa donde Peñarol ve dos jugadores lesionados en el mismo momento, Guzmán Pereira y Formiliano debiendo ser sustituidos por Novick y Quintana.

Boston se acerca a los 27´ con un centro desde la derecha que se cierra sobre el arco y Dawson despeja con una mano al córner por encima del horizontal.

A los 31´ un centro al área, la baja Viatri y saca la media vuelta Maxi Rodríguez pero la pelota le sale al medio justo donde estaba parado Berbia que contiene bien.

Pudo empatar Boston River a los 41´ luego de un centro desde la izquierda que cayó en el área y le queda a Scotti que sorprendió entrando por el medio pero le pega muy de abajo a la pelota y la manda lejos por encima del horizontal.

Un minuto después, otra vez Rossi por derecha, el toque atrás para Maxi Rodríguez que saca otro remate bien colocado, abajo contra la base del palo izquierdo que consigue despejar Berbia al córner en otra notable atajada.

La última fue para Peñarol sobre el cierre mismo del encuentro. Se la lleva Gastón Rodríguez que había ingresado por izquierda y mete la pelota al medio para Maxi Rodríguez, que controla, se abre hacia afuera para acomodarla y saca el remate que se va por encima del horizontal. Evidentemente hoy no estaba para el argentino que metió dos pelotas en los palos, le sacaron una de la línea y el arquero le tapó dos más.

Ganó Peñarol, por primera vez ante Boston River y metió los 9 primeros puntos en esas 15 finales que tenía por delante. Volvió a jugar mucho mejor en el segundo tiempo, cosa que se ha repetido en los 3 partidos aunque hoy contó desde el inicio con los jugadores que habían cambiado las cosas en los segundos tiempos de los encuentros anteriores.

Ahora será Wanderers en el Campeón del Siglo como antesala del clásico donde nuevamente Ramos se estará jugando gran parte de su futuro.