Volviendo a la victoria. Peñarol 4 Boston River 0

Peñarol con la necesidad imperiosa de volver a la victoria luego de dos juegos sin obtenerla y el técnico López con un rompecabezas de lesiones que no alcanzan a resolverse. A las ya conocidas bajas de Gargano y el toro Fernández (“cortesía” de un patadón de Barboza que sigue jugando sin problemas en Wanderers y que nos privó de nuestro goleador por 3 partidos ya), se sumaban las nuevas de Lema, Hernández y Estoyanoff. Las buenas noticias, para los regresos de Brian Rodríguez, Busquets y Giovanni González que terminaron sus amistosos con las distintas selecciones que estuvieron paseando por el mundo sin ningún provecho para Peñarol. A esto se sumaba el regreso de Formiliano a la zaga.

En el equipo, Enzo Martínez ocupó el lugar de Lema (repitiendo titularidad porque la semana pasada faltó Formiliano), Rojo por Hernández en el lateral izquierdo, en el lateral derecho López prefirió a Busquets (que paseó menos distancia que Giovanni), el regreso de Brian por Estoyanoff, ingresó Lores en el medio y adelante Acevedo mantuvo la titularidad en el lugar del toro.

En filas de Boston River dos ex defensores aurinegros: el recordado hormiga Carlos Valdéz y Miguel Amado.

Pero Peñarol no jugaba solo contra Boston River en la noche de hoy, sino también contra el árbitro Andrés Cunha que tiene la reiterada mala fortuna de equivocarse siempre en contra del equipo aurinegro y hoy no fue la excepción.

Peñarol arrancó como para arrasar a su rival, porque antes del minuto de juego ya había tenido tres chances claras para convertir. La primera de movida, con pelota de Acevedo a la derecha para que fuera Brian Rodríguez como puntero para desbordar, toque al medio y definición de Acevedo para que el arquero Falcón se estire abajo contra su palo izquierdo para mandar al córner.

Del despeje de ese córner le queda a Brian Rodríguez que saca la volea desde fuera del área y otra vez manda Falcón al córner volando contra el palo izquierdo.

Y en ese córner, cabecea solo Viatri y la pelota revienta el travesaño cuando nada podía hacer ya el arquero.

Otra sobre los 14´ con un tanteo de Viatri apenas pasado el círculo central viendo que estaba adelantado el arquero Falcón y la pelota pica apenas afuera contra la base del palo derecho.

Una más a los 18´, una pelota que trae Busquets por derecha, Lores en pared con Avecedo que abre para Busquets que entra solo al área y saca el remate que rebota contra el palo izquierdo de Falcón. En el rebote le queda a Viatri que remata apurado y se le va afuera contra el palo derecho.

Pudo ser de nuevo a los 34´ cuando Lores lucha una pelota en el medio que deriva para el cebolla Rodríguez que hace una sutil asistencia de taco para Viatri que remata y la pelota se va afuera contra el palo izquierdo.

Boston River apenas remató al arco en el minuto 43 cuando luego de un córner que no consigue terminar de despejar la defensa, la pelota le queda a Silva que saca un remate débil que contiene bien Dawson sobre su arco.

Peñarol mereció irse ganando el primer tiempo y por más de un gol, pero la mala definición, alguna atajada del arquero y los palos impidieron que el carbonero terminara yéndose al vestuario en ventaja.

Pero lo que Peñarol no pudo concretar en el primer minuto del primer tiempo, habiendo tenido 3 chances para hacerlo, lo concreta en el primer minuto del segundo tiempo. Tiro libre sobre la mitad de la cancha hacia la derecha enviado en forma de centro al segundo palo, gana Viatri para meter el cabezazo hacia el medio, la pelota supera a Falcón y Acevedo toca sobre la línea con el arco vacío para marcar la merecida apertura mirasol.

Sobre los 11´ una pelota que pelea y gana Viatri por el medio y le queda a Brian Rodríguez que entra por izquierda, se mete hacia el medio y lo bajan claramente dentro del área. Clarísimo penal que Cunha no cobra, aumentando su leyenda negra de equivocarse siempre en contra de Peñarol. Pero aún habría más.

A los 17´ una pelota que gana Rojo, se proyecta por la izquierda y como no le sale nadie, saca el remate fuerte que Falcón consigue rechazar al córner en otra buena atajada. Y de ese córner llegará el segundo tanto mirasol. Lo tira Brian Rodríguez y Viatri gana el cabezazo en el primer palo para cruzar la pelota, superar el esfuerzo del arquero y hacer que se meta contra el palo izquierdo. 2 a 0 y tranquilidad para el aurinegro.

A los 22´ una jugada impresionante con más de 15 toques consecutivos que permite que el cebolla se meta por el medio y luego de la devolución saque el remate en el área chica y el arquero Falcón consigue cubrir el arco con el cuerpo para rechazar la pelota.

Pudo ser de nuevo a los 25´ cuando Viatri saca un remate desde afuera del área que rechaza Falcón contra el palo derecho, el rebote le queda a Giovanni González que mete el centro y cabecea Viatri haciendo que la pelota se pierda afuera contra el palo izquierdo.

Y sobre el final vendrían más emociones de todo tipo. Porque a los 39´ una pelota larga, cruzada de derecha a izquierda, falla Valdéz en el cierre y se va solo Brian Rodríguez hacia el área y cuando le sale el arquero consigue tocar al medio para que entre el cebolla Rodríguez sin marca y toque hacia el arco vacío marcando el tercero.

El cuarto llega a los 42´. Un lateral en ataque desde la derecha, el cebolla que recibe, va hasta el fondo y mete el centro que supera el esfuerzo del arquero y por el segundo palo entra Acevedo para volver a tocar la pelota con arco libre cerrando el 4 a 0.

Pero todavía faltaba más para la leyenda negra de Cunha. Porque con el tiempo cumplido, un centro desde la izquierda al área aurinegra y despeja Enzo Martínez limpiamente y Cunha inventa un penal que ni los jugadores de Boston River podían creer. Lo remata Coelho, jugador de Nacional y Dawson pone justicia rechazando la pelota contra el palo izquierdo.

Ganó y goleó Peñarol. Erró mucho en el primer tiempo, pero fue contundente en el segundo. De nuevo tuvo que resolver las complicaciones que le generó Cunha que cada vez que nos arbitra tiene una tarde-noche negra y se equivoca siempre en contra nuestra.

Goleó Peñarol, recuperó la sonrisa y el camino del triunfo luego de dos partidos con resultados negativos y queda a la espera de lo que pase con Fénix mañana.

Ahora vendrá un momento muy difícil, porque Peñarol debe viajar a Rio a enfrentar al poderoso Flamengo el miércoles, juega nuevamente el sábado contra Danubio y el miércoles siguiente recibe a la LDU antes de viajar a Colonia para enfrentar a Plaza. Con el toro Fernández lesionado (gracias Barboza y el árbitro Tejera sacó amarilla!), Gargano que si regresa, lo hará con una enorme falta de fútbol, tampoco estará Estoyanoff y varios jugadores entre algodones (el cebolla, Formiliano, Viatri).

Serán dos semanas decisivas en el futuro aurinegro en este primer semestre del año.

Más puntos perdidos

López debía armar un equipo nuevo para enfrentar a Racing en el CDS debido a la gran cantidad de ausencias por diferentes motivos de jugadores titulares. Faltaban Brian Rodríguez, Giovanni González, Busquets y Núñez que están paseando con las diferentes selecciones para jugar partidos amistosos de ningún provecho para el club. Continúa lesionado Gargano y se sumó a última hora la lesión de Formiliano. Pero además tampoco pudo jugar el toro Fernández lesionado por una patada criminal de Barboza que sí pudo jugar en Wanderers porque apenas le sacaron una tibia amarilla. Un verdadero despropósito del árbitro Tejera que tuvo que dejar a Wanderers con 10 a los 10´de juego y en cambio fue Peñarol el que perdió a su delantero para ese partido y para este también.

El técnico armó el rompecabezas dando ingreso a Enzo Martínez en la zaga, bajando a Trindade al lateral derecho, dando ingreso a Guzmán Pereira en el medio (la única noticia positiva), Estoyanoff volvió a la titularidad por Brian Rodríguez y arriba tuvo el ingreso de Acevedo por el toro.

Como siempre con la obligación de ganar, pero más aún hoy porque había goleado Fénix y no había que perder pisada. Peñarol no podía ser puntero en esta fecha, pero no debía perder más puntos.

Racing venía de su primer triunfo en el campeonato y contaba en sus filas con el ex aurinegro Ignacio Nicolini.

Peñarol empezó rápido su tarea. Porque en su primer ataque convirtió. Iban apenas 3´ cuando Guzmán Pereira pelea y gana una pelota en el medio y mete un notable pase para que corra Acevedo solo por la derecha. El arquero tiene que salir fuera del área, Acevedo lo elude fácil, entra al área y no se apura a definir colocando bien la pelota entre dos defensas, marcando la apertura.

Y ese gol le hizo mal al partido, porque se hizo chato, aburrido, por momentos cansador. Peñarol casi no ofendió más por las bandas y Racing se hizo del medio y no dejó espacios (como si lo hizo en la jugada del gol).

Racing tuvo una a los 12´ con un tiro libre de Nicolini desde la derecha en forma de centro y salta solo Lacoste, descuidado por la defensa mirasol, para meter el cabezazo que se va por encima del horizontal cuando parecía que estaba el tanto.

Una para Peñarol a los 28´ con Canobbio por izquierda, engancha hacia adentro y saca el remate que le sale muy débil y contiene sin problemas el arquero Rodríguez, abajo contra el palo derecho.

Responde Racing de inmediato con un remate muy bueno de Angelo Rodríguez desde afuera del área y la pelota hace la comba y se pierde apenas arriba del ángulo izquierdo del arco mirasol.

Recién a los 40´ tuvo otra el aurinegro. Es otra vez Canobbio quien va por izquierda y mete el toque atrás para el cebolla que saca un zapatazo desde afuera del área que rebota en un defensa y se va al córner contra el palo derecho que estaba sin cuidar.

El primer tiempo termino con ventaja aurinegra por 1 a 0, pero Peñarol no jugó bien. Fue deslucido, perdió mucho en mitad de cancha, no usó bien las bandas (salvo en el gol) y no generó la cantidad de situaciones que nos tiene acostumbrados el equipo de López.

Pero en el segundo tiempo Racing nos pagó con la misma moneda, porque hizo dos goles en sus dos primeros ataques. El primero a los 6´ cunado la defensa permite levantar un centro desde la izquierda a Bonifazi, no salta Trindade, se deja ganar la posición Hernández y cabecea Araujo, en caída para superar a Dawson y meter la pelota en el ángulo derecho del arco para marcar el empate.

Y dos minutos después, Estoyanoff pierde una pelota en el medio, se la lleva Arismendi que mete el pase largo para Sosa que entra por izquierda, supera a Lema con un enganche y saca el remate cruzado con comba perfecta para superar la estirada de Dawson y clavarse contra el pelo izquierdo. En dos minutos, Peñarol pasaba de ganar 1 a 0 a perder 2 a 1.

Y sintió el impacto el carbonero, que se puso nervioso, se olvidó del ataque por las bandas, abusó del pelotazo y no creo nada en juego asociado.

Y todavía pudo aumentar Racing a los 17´ con un remate fuerte desde fuera del área de Arismendi y Dawson vuela para mandar la pelota al córner por encima del horizontal.

Un minuto después, una muy buena pared entre Hernández y Viatri que devuelve notablemente la pelota para que Hernández entre solo al área y levanta la pelota por encima del arquero que salía a cortar y un zaguero la rechaza sobre la línea cuando entraba.

A los 37´ un córner desde la derecha y el cabezazo del cebolla Rodríguez en el primer palo que contiene el arquero Martín Rodríguez contra su palo derecho.

Un minuto después pudo empatar el aurinegro. Una pelota robada en la salida albiverde y la pelota queda para Gastón Rodríguez que enfila hacia el arco y su remate lo ahoga el arquero para mandarla al córner rechazando con el cuerpo.

Peñarol buscaba sin ideas, la tribuna reclamaba, Racing hacía tiempo y el arbitraje permitía el corte permanente.

Pasada la hora una pelota a la izquierda para Trindade, que va hasta el fondo como puntero, saca el centro y cabecea Gastón Rodríguez en el primer palo para ganarle al arquero y cruzar la pelota que se mete por el medio del arco marcando el empate.

Peñarol rescató un empate sobre la hora y siempre es mejor que perder. Pero pierde puntos por segundo partido consecutivo y frena un arranque que había sido muy bueno. Ahora quedó a 3 puntos de Fénix y reduciendo el margen de error.

Peñarol jugó muy mal. No aprovecho la tempranera ventaja y dejó de atacar por las puntas. Dos veces lo hizo con criterio y convirtió dos goles. Cuando se empeñaron en ataques centrales y centros al área, todo se hizo muy fácil para la defensa racinguista. Hoy se sintieron mucho todas las ausencias en el equipo. La de Formiliano atrás, la de Giovanni en el lateral, la de Brian Rodríguez por la banda y la del toro Fernández en el área, pero además se siente la de Gargano en el medio y la merma del rendimiento del cebolla Rodríguez.

El fin de semana que viene será el turno de enfrentar a Boston River en el Centenario y Peñarol deberá volver a la victoria para no perder pisada en este campeonato.

Mucho más que un partido

De vuelta al Centenario después de mucho tiempo. Concretamente desde el 3 de febrero cuando Peñarol fue muy superior a su rival en el clásico de la Supercopa, pero no lo pudo liquidar y terminó pagándolo en los penales. El Centenario que es tierra sagrada para el mirasol por ser el estadio donde ha dado más vueltas olímpicas en su historia y seguramente, las seguirá dando. Aspecto raro del Centenario, con las cabeceras vacías y con toda la hinchada aurinegra concentrada en la Olímpica.

Hoy Peñarol buscaba ganar, para continuar puntero, pero además para sacarle 12 puntos de ventaja al rival de siempre en apenas 15 disputados. Un rival que hoy destituyó a su técnico, a apenas 5 partidos de iniciar el campeonato.

En Peñarol volvía Dawson al arco, en lugar de un Thiago Cardozo a quien no le patearon al arco en el partido de copa. Tampoco fue de la partida Canobbio que fue al banco de suplentes, subrogado por el lolo Estoyanoff. Un Peñarol extraño como el Centenario, vistiendo todo de amarillo.

Enfrente Wanderers. Un equipo siempre complicado para el aurinegro. Que apuesta al buen juego y está bien dirigido. Con varios ex aurinegros en el equipo titular como Macaluso, Albarracín y Pastorini.

Wanderers tuvo más la pelota desde el principio y la movió bien, pero en los primeros minutos Peñarol parecía más incisivo y tuvo sus chances que lamentablemente no las concretó y las pagó muy caro.

La primera para el aurinegro fue a los 5´ con una muy buena combinación de Brian Rodríguez y Lucas Hernández por izquierda, el centro y el cabezazo de Viatri en el primer palo que se pierde apenas afuera contra el palo derecho del arquero De Arruabarrena.

A los 11´ debió quedarse con 10 hombres el bohemio, porque Barboza llega tarde a una pelota y le mete una plancha al toro Fernández que era roja directa. El resultado? amarillita que saca el árbitro Tejera y el toro que siguió en una sola pierna, visiblemente disminuido el resto del primer tiempo.

Sobre los 15´ el primer anuncio de Wanderers, con un remate desde afuera de Barboza, muy débil que contiene Dawson sin problemas, abajo contra su palo derecho.

Sobre los 20´ una clarísima para el aurinegro. Un pase profundo para Estoyanoff que gana en velocidad por derecha, va como puntero, mete el centro atrás y el remate de Viatri que le sale muy débil y al medio y permite que el arquero rechace con el cuerpo, cuando estaba el tanto mirasol.

Otra sobre los 32´ con un remate desde afuera del área de Brian Rodríguez y una notable atajada de De Arruabarrena que despeja abajo.

Y de ahí en más, fue todo de Wanderers, que hasta ese momento había sido dominado y se esperaba el tanto mirasol. Pero ya avisa a los 33´ con un pase largo para que vaya Riolfo como puntero derecho, el centro atrás y el cabezazo de Albarracín que se pierde apenas afuera contra el palo izquierdo cuando nada podía hacer Dawson.

Pero ese aviso se concreta a los 35´. Recibe por izquierda Albarracín, se mete hacia el medio y hace el pase filtrado para Pastorini, que le gana la espalda a Formiliano y más rápido que Lema, recibe solo y toca ante la salida de Dawson. Dos ex Peñarol para la apertura del bohemio.1 a 0 Wanderers y cambió el partido.

Porque ya no ofendió Peñarol, que sintió el golpe, no creó más situaciones y tampoco pudo salir a presionar, seguramente cansado del trajín de los partidos.

El golpe de gracia llega a los 44´ Otra vez un pase filtrado al área, Pastorini recibe de espaldas y toca atrás para la entrada por el medio de Morales ante una defensa lenta del mirasol, queda solo ante el arquero y cruza el remate para meterla contra el palo izquierdo de Dawson que no pudo ensayar defensa alguna. 2 a 0 Wanderers y panorama negro para el mirasol.

El segundo tiempo se presentaba a pedir de boca para el bohemio que se siente muy cómodo tocando la pelota y con un Peñarol que debía salir a la desesperada con sus hombres cansados y exponiéndose al contragolpe.

López vuelve con Maximiliano Rodríguez por el toro Fernández que ya no pudo jugar más luego de la alevosa patada de Barboza que no sancionó con expulsión Tejera.

Pero Peñarol no pudo gravitar ante un Wanderers que siguió manejando la pelota y jugó muy tranquilo. Creó de todos modos alguna chance que no pudo convertir.

La primera a los 3´ con un centro desde la derecha y el cabezazo de Formiliano, abajo contra el palo derecho y el arquero hace otra notable atajara estirándose para sacarla.

A los 9´ una muestra de lo que se exponía el mirasol. Va el chileno Bravo por derecha, mete el centro pasado al segundo palo, Albarracín la baja y saca el remate fuerte que consigue rechazar al córner Dawson en notable atajada mandando la pelota fuera contra el palo izquierdo.

Otra para el Bohemio a los 29´ con un remate de Barboza desde afuera del área que pasa ancho contra el palo derecho.

Peñarol iba, sin ideas y sin suerte, porque siempre la pelota parecía rebotar y quedarle a un defensa bohemio.

Recién sobre el final tuvo chances claras el mirasol para descontar. A los 39´ una pelota mal despejada por la defensa y el toque al medio para Viatri que remata desde la media luna y le sale muy frontal y permite que controle el arquero.

A los 44´ un córner desde la derecha, entrevero en el área, un remate que pega en la cabeza de un defensa cuando entraba y el rebote le queda a Lucas Hernández que saca el remate desde afuera del área que se va encima del horizontal.

Ya pasada la hora una pelota cruzada para que entre Canobbio al área, enganche hacia el medio y saque el remate para otra impresionante ataja de De Arruabarrena, abajo contra la base del palo derecho cuando se metía.

Cuando la pelota no quiere entrar y rebota siempre hacia el lugar contrario, cuando el arquero rival ataja tanto, cuando tus propios delanteros erran situaciones claras, cuando el juez no aplica el reglamento y no expulsa a un jugador en los primeros minutos del juego, cuando además en esa incidencia se te lesiona el mejor delantero y cuando el rival además toca bien la pelota y define notablemente las posibilidades que tiene, se hace realmente difícil.

Ganó bien Wanderers, jugó muy bien y Peñarol no aprovechó las situaciones que tuvo para convertir. A los 20´ Peñarol debía estar ganando 1 a 0 y con un hombre de más en el campo. No fue así porque fallo Viatri una muy clara y porque Tejera permitió que lesionaran al toro Fernández con una patada alevosa que le costó al infractor una barata tarjeta amarilla.

Perdió Peñarol y perdió mucho más que el partido. Perdió la punta del torneo, perdió el invicto, perdió la chance de sacarle 12 puntos a Nacional, perdió a su mejor definidor gracias a la complicidad del árbitro Tejera. No pudo definir en el área rival, generó poco juego, no paró a nadie en el medio y estuvo flojo en defensa. Extrañó muchísimo a Gargano y a Guzmán Pereira y no encontró nunca la llave del partido.

Ahora será Racing en el CDS con menos margen de error porque ahora el puntero es Fénix.