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jueves, 19 de junio de 2014

Peñarol primer campeón de la Libertadores.

Una vez más nos toca la grata tarea de escribir para recordar el aniversario de otra gesta gloriosa del Club Atlético Peñarol. En esta ocasión se trata del aniversario de la conquista de la primera edición de la Copa Libertadores de América.

Una idea que había surgido originalmente en Chile, fue apadrinada con ardoroso calor por los dirigentes de nuestra institución, verdaderos padres de la disputa de este certamen.

Así se dispuso la disputa de la primera Copa de Campeones de América (aún no se llamaba Libertadores) donde participarían los campeones de cada país sudamericano. En esa primera edición, no se pudo contar con los 10 países sudamericanos.

Los que inscribieron a su campeón fueron: Argentina(San Lorenzo), Brasil (Bahía), Bolivia (Jorge Wilsterman), Chile (Universidad de Chile), Colombia (Millonarios), Paraguay (Olimpia) y Uruguay.

El campeón Uruguayo era Peñarol, en medio de la consagración de su primer quinquenio de oro (1958-1962). 

Toco que fuera Peñarol quien tuviera el honor de abrir la copa y jugar el primer encuentro de su historia. Se disputó el 19 de abril en Montevideo y Peñarol goleó al Jorge Wilsterman por 7 a 1 con tantos de Alberto Spencer (4), Carlos Borges (2), y Luis Cubilla.

La serie se definió en Bolivia donde empataron 1 a 1. El tanto aurinegro fue de Luis Cubilla.

La semifinal nos enfrentó con el poderoso San Lorenzo de Almagro de Sanfilippo, Rossi y Bilardo.

En el Centenario fue 1 a 1 (Carlos Linazza para el carbonero) y en Parque Patricios 0 a 0 por lo que se imponía la disputa de un tercer partido de desempate en  terreno neutral. Los dirigentes aurinegros, encabezados por Cataldi (gran responsable de la realización de esta Copa) convencieron a sus pares argentinos para que ese tercer partido se disputara en Montevideo, dada la enorme repercusión popular que la copa había tenido en nuestro país, que contrastaba con la casi indiferencia argentina.

Los dirigentes de San Lorenzo, seducidos por una recaudación económica importante, accedieron y el tercer partido se disputó en el Centenario y fue triunfo carbonero 2 a 1 con dos goles de Spencer.

Así llegamos a la final ante el aguerrido Olimpia paraguayo.

La primera final se disputó en el Centenario y fue victoria carbonera 1 a 0, otra vez gracias a Spencer.

El gran partido definitorio se disputó en Asunción. En el viejo estadio de Puerto Sajonia. Con un clima hostil propio de las primeras copas, Peñarol se mantuvo firme en suelo guaraní y consiguió el empate 1 a 1 con gol de Luis Cubilla a 8 minutos de final que lo consagro como PRIMER CAMPEON DE CAMPEONES DE AMERICA.

En aquella tarde asunceña, el campeón uruguayo salió al campo con: Luis María Maidana, William Martínez, Milton Alves da Silva "Salvador", Santiago Pino, Néstor
Gonçalves, Walter Aguerre, Luis Alberto Cubilla, Carlos Abel Linazza, Alberto Pedro Spencer
(46´ Juan Eduardo Hohberg), José Mario Griecco y Carlos Borges. Este equipo era dirigido por Roberto Scarone primer técnico campeón de la Libertadores.

Así nuestro club escribía una de sus primeras páginas en el libro que lo consagraría como CAMPEON SUDAMERICANO DEL SIGLO XX reconocido por FIFA.

Por suerte una vez más tenemos que agradecer a 11 leones aurinegros que dentro de una cancha de fútbol colocaron un ladrillo más en la alta muralla de nuestra gloria.

SALUD CAMPEONES!.

Cubilla la clava en el arco de Arias
PEÑAROL CAMPEON DE AMERICA 1960


martes, 17 de junio de 2014

PEÑAROL POR SOBRE TODAS LAS COSAS

En medio de la disputa del mundial, es casi imposible encontrar noticias de Peñarol en la radio, la Tv o las páginas deportivas. Muchos dicen que es imposible sustraerse a la “fiebre mundialista”, sin embargo es perfectamente posible hacerlo.

En lo personal, después del partido ante Cerro Largo, simplemente deje de escuchar y ver programas deportivos y me limito a consultar las páginas partidarias en internet. La razón es muy sencilla: lo único que me importa es Peñarol y desde el momento que quedó sin posibilidades de continuar peleando el campeonato, dejó de interesarme el fútbol.

Es más; con el correr de los años me he dado cuenta que no me gusta el fútbol. Soy fanático de Peñarol pero ni siquiera soporto ver un partido entero si no juega el aurinegro porque sencillamente me aburro. Cuando mis amigos o compañeros de trabajo comentan o me preguntan si he visto el partido del Real Madrid, del Barcelona, de la Juventus o del Liverpool, me doy cuenta que ni siquiera sabía que jugaban.

A tanto llega mi fanatismo, que lo mismo me sucede con los partidos del tradicional rival. Aunque a alguien le pueda costar creerme, muchas veces no me entero del resultado hasta el día siguiente, porque los únicos partidos de Nacional que veo en el año son los clásicos. Con orgullo puedo decir que para mí es absolutamente cierta la afirmación “el bolso no existe”.

Esto no solo me pasa con el futbol porque no es una cuestión de deporte, es de camiseta. Estuve en los partidos que consagraron a Peñarol campeón del Federal de basquetbol en 1982 y campeón sudamericano de básquet en el 83. Un día; Peñarol  se desafilio de la liga y no compitió más. Nunca más vi un partido de basquetbol.

La selección no me inspira nada. No soy contra de Uruguay, no deseo ni me pone feliz que pierda, pero tampoco me quita el sueño ni sigo los partidos. Expresar esta opinión me ha costado desde que me llamen apátrida hasta hdp, como si el hecho de no sentir nada por la selección, constituyera una ofensa al país o una negación de mi “uruguayez” (me resisto a escribir la palabra nacionalidad).

Solo una vez fui al estadio en un partido de la selección. Fue en la despedida del mundial del 86 cuando Uruguay jugó ante Peñarol. Por supuesto fui a la Ámsterdam y grité el gol de Diego Aguirre, el de la selección no.

Quiero dejar claro que no comparo a Peñarol con la selección, porque Peñarol es incomparable. No se trata de dos amores diferentes.  Peñarol es parte de mi vida, es el cuadro de mis viejos, es la camiseta que me ha hecho llorar de alegría y de tristeza. Peñarol es el nombre que repito cientos de veces cada día, es el responsable de mi estado de ánimo los lunes a la mañana y es la razón que agradezca a mis viejos “haberme sabido orientar por los caminos de la felicidad deportiva” como decía Cataldi.

Peñarol es único, es primero, es primordial, es insustituible. Con Peñarol no se jode. Como dice José Carlos Domínguez: “Peñarol no es cosa de vida o muerte, es mucho más que eso”.

miércoles, 11 de junio de 2014

Campeon de América 1961

La historia del Club Atlètico Peñarol es tan vasta y tan rica que prácticamente no pasa un mes donde no exista alguna fecha que conmemorar.

En el dia de la fecha celebramos un nuevo aniversario de la conquista de la Copa Libertadores de 1961 que consagraba a Peñarol como primer bi.campeón de América.

En la ocasión fue lograda en tierras brasileñas, en el estadio de Pacaembú, ante el Palmeiras, campeón nacional de ese pais en la época. Seria el paso previo y necesario para el logro del primer título de Campéon de Mundo que se lograria ante el Benfica portugués, algunos meses después.

Para no reiterarnos en palabras, preferimos dejar el enlace a la crónica que haciámos el año pasado en esta misma fecha y que pone el énfasis en el gol conquistado por Sasía y la curiosa situación que se dió en su entorno y que llevó al línea a declarar "gol no, golazo" despejando cualquier duda.

Para quien le pueda interesar lo dejamos con el enlace respectivo http://manyahistoriasdenuestrahistoria.blogspot.com/2013/06/gol-no-golazo-penarol-campeon-de.html

SALVE GLORIOSO PEÑAROL en otra página de gloria para la mejor historia carbonera.