Arrollador. Peñarol 5 Defensor 1

Peñarol se presentaba en el Centenario en su primer partido oficial del 2016 ante uno de los rivales que en las últimas décadas nos ha traído más problemas. Para ello el técnico Da Silva decidió un único cambio con respecto a la formación que empató el jueves por la noche en Lima: el regreso de Maximiliano Rodríguez por Nicolás Freitas.

A priori se trataba de una decisión arriesgada teniendo en cuenta el viaje, el escaso tiempo de recuperación y el hecho que varios jugadores parecieron terminar extenuados al término del juego por la copa.

Defensor salió a aprovechar ese cansancio aurinegro, presionando en campo mirasol, no dejando salir cómodo desde el fondo y obligando a que los zagueros salieran con pelotazos que quedaban siempre en poder de los jugadores violetas. Pero le faltaba la otra parte, porque no generaba peligro en ofensiva y sus ataques carecían de peso.

La primera fue para el aurinegro a los 10´ con un toque largo de Costa para la entrada de Forlán por izquierda que queda mano a mano con el arquero Irrazabal pero no consigue rematar y el arquero le cierra bien el ángulo de tiro y consigue despejar la pelota.

La apertura es a los 26´ cuando el Nico Olivera (el mismo de la patada asesina contra Alejandro Silva) se tira al suelo y el árbitro inventa una falta de Guillermo que no lo toca. Lo remata Felipe Rodriguez que la clava contra el ángulo superior izquierdo de Gurucuega que voló pero que era imposible que pudiera sacar ese zapatazo. Un golazo de Defensor pero viciado de nulidad porque no fue falta contra Olivera.

Minutos después en una jugada donde Nandez va a buscar una pelota con un jugador violeta, le termina sacando amarilla comprando de nuevo una falta que no es y sumándose a la descarada campaña que los periodistas han estado armando en contra de juvenil aurinegro.

Pero eso pareció despertar a Peñarol, como si le hubieran mojado la oreja se fue yendo arriba por momentos con más enjundia que futbol pero empezando a acumular chances de convertir.

La primera es a los 35´ con un centro pasado para la entrada de Forlán, esta vez por derecha que vuelve a enfrentar al arquero que de nuevo consigue achicarle el ángulo de tiro y termina rechazando la pelota.

Un minuto después un remate desde afuera de Aguiar que contiene bien Irrazabal.

El empate llega a los 39´ con una apilada magistral de Maxi Rodríguez por izquierda y el toque atrás de taco para Forlán que domina, la acomoda y saca el derechazo que supera la estirada de Irrazabal para clavarse a media altura contra el palo derecho poniendo el 1 a 1.

Siguió dominando Peñarol después del empate y a los 43´ otro remate de Maxi Rodríguez desde afuera es contenido por Irrazabal.

Sobre el filo del cierre llega el segundo de Peñarol. Una salida desde nuestro campo. Forlán mete un certero cambio de frente para Aguirregaray que sube por derecha, mete la diagonal al medio para sacarse al marcador y saca el remate a la puerta del área que rechaza el arquero. El rebote lo toma Forlán y de primera saca el remate, ahora de zurda para que la pelota se clave contra la base del palo derecho marcando el 2 a 1 con el que se cerró el primer tiempo.

Honestamente jugó mejor Defensor pero ganaba por una jugada ilícita y Peñarol mostró la rebeldía que le pedimos a los equipos aurinegros para darlo vuelta. Había que ver que factura nos podía pasar el físico en el segundo tiempo.

Ese segundo tiempo nos sorprendió a todos porque nos encontramos con un Peñarol arrollador. Ya a los 3´ se vió la tónica de un Peñarol ofensivo cuando un centro de Forlán desde la derecha lo recoge Nandez intentando una chilena que se le va por encima del horizontal.

A los 5´ un pase largo de Valdez deja solo a Murillo contra el arquero y el línea cobra una posición adelantada increíble a un jugador que estaba habilitado por más de un metro. Como para terminar una noche pésima del arbitraje y siempre en perjuicio de aurinegro.

Cuando iban 11´ pudo empatar Defensor con un tiro libre desde la izquierda a modo de córner corto y el cabezazo solo de Rabuñal en el área chica que se va por encima del horizontal de Guruceaga.

El tercero llega a los 20´ con un tiro libre de Forlán desde la derecha que se la pone en el pie a Murillo (no fue un centro, fue una habilitación de gol) para que el colombiano la tome sin dejarla picar y la clave contra el palo izquierdo marcando el 3 a 1.

Y de ahí en más fue todo de Peñarol que fue acumulando goles. El cuarto llega a los 36´ con una salida de Albarracín por derecha, el cambio para Forlán entando por izquierda y el toque magistral del 10 para Murillo que entraba por el medio y define fuerte, arriba para dejar sin asunto a Irrazabal y poner el cuarto.

La lotería llega a los 40´. Esta vez la salida es por izquierda por Olivera que mete el centro combado que se va alejando del arco y Forlán mete el cabezazo que hace que la pelota se eleve, supere a Irrazabal y se meta arriba contra el palo izquierdo cerrando un 5 a 1 soñado.

Y pudo ser más porque sobre el cierre del partido ataca Albarracín por derecha, le mete un caño a Suarez y su remate trabado se va apenas arriba del horizontal.

El encuentro terminó con la tribuna disfrutado el juego y los goles y cantando, una vez más, por la obsesión de la copa Libertadores. Aun cuando muchos hablen de imposibles y quieran circunscribirse a la disputa del campeonato doméstico, el verdadero hincha de Peñarol sigue soñando con lo más alto y mientras tenga posibilidades, seguirá deseando ser campeón de todo.

Un partido redondo de Peñarol, como hace tiempo no veíamos (probablemente desde aquella final ante el mismo Defensor y dirigidos por éste mismo técnico). Una actuación consagratoria de Forlán, con un hattrick perfecto (uno de derecha, otro de zurda y el tercero de cabeza) y dos asistencias para dos goles (la del tiro libre fue un pase gol y no un centro).

Peñarol hizo el mejor partido del año ante el rival más encumbrado que hemos enfrentado hasta el momento, superó el mejor inicio del rival, se repuso a la desventaja de la apertura (agravada por provenir de un fallo erróneo del juez), superó un arbitraje perjudicial, no sintió para nada el cansancio del viaje y las pocas horas de recuperación y terminó goleando al rival y hasta pudiendo convertir algún tanto más.

Ahora vendrá una semana donde los jugadores podrán descansar para el sábado poder enfrentar a Fénix buscando mantener la punta del clausura y la anual.