Volviendo
a la disputa del mediocre campeonato local, Peñarol volvía al Centenario para
jugar ante El Tanque con la posibilidad de quedar como líder si ganaba su
encuentro. Si, el nivel del campeonato local es tan desastroso que este
mediocre equipo aurinegro (de los peores que yo haya visto) continua con
chances.
Pero
para eso había que ganar. Misión nada fácil para un equipo que regala los goles
que regala el nuestro, que se para tan mal en defensa, que genera tan poco
juego y que tiene tanto déficit para convertir.
Y así
se mostró el equipo durante los primeros 25 minutos. Donde no generó nada, no
remató al arco y no dio sensación de seguridad en el fondo. Incluso Castillo
volvió a salir mal en alguna jugada donde falló en el cálculo y se quedó con
las manos vacías.
La
primera del aurinegro se produjo recién a los 24´ con un córner desde la
izquierda que cabecea solo Darío Rodríguez en el primer palo. Cabecea bien, fuerte,
seco, abajo y el arquero Nicola Pérez hace una muy buena contención y el rebote
no lo puede tomar Toledo que venía de frente.
Pudo
ser otra vez a los 27´ con un gran pase en profundidad de Toledo para la
entrada de Aguiar que queda mano a mano con el arquero que le cierra bien el
arco y consigue despejar el remate con el cuerpo. En esa misma jugada, pudo ser
también para Jonathan Rodríguez con otro pase para la entrada del joven
delantero que demora la definición y pierde la oportunidad.
Un
minuto después de esa jugada nos paga El Tanque con un contragolpe rápido de
esos que sufre tanto nuestra defensa. Traen la pelota por derecha y con tres
toques dejan a Iglesias de frente con Castillo y el toque de este, cruzado al
palo más lejano del arquero hace que la pelota se meta arriba contra el ángulo
superior izquierdo del arquero. Otra vez el equipo de Fossati comenzaba
perdiendo el juego justo cuando estaba comenzando a imponerse.
Pero
cuando temíamos que Peñarol acusara el golpe, se fue arriba con amor propio
buscando el empate, que debió llegar antes.
Un
minuto después del gol de El Tanque tuvo una doble oportunidad Peñarol de
empatar. Pelota por alto que baja bien Toledo atrás para la entrada de Pacheco
que remata fuerte desde afuera del área y rechaza Pérez en gran atajada al
córner. De ese tiro de esquina levantado por Pacheco cabecea nuevamente solo Darío
Rodríguez y otra vez vuela Pérez para sacarla contra el palo derecho.
Finalmente
a los 35´ el tercer cabezazo franco de Darío Rodríguez terminaría dando sus
frutos. Tiro libre desde la derecha de Aguiar y cabecea Darío en el segundo
palo y la pelota besa el travesaño superando al arquero Pérez y metiéndose en
el arco de la Ámsterdam para marcar lo que era un merecido empate.
Tres minutos
le bastó a Peñarol para darlo vuelta. Una pelota alta al área de El Tanque y Falce
marca penal por agarrón a MacEachen en el forcejeo. Confieso que no vi penal en
el momento en esa jugada y justo es decirlo.
Lo
remata Pacheco contra el palo derecho, Nicola Pérez contra el palo izquierdo y
Peñarol 2 a 1.
Así
terminó el primer tiempo, con Peñarol ganando 2 a 1 para nosotros,
merecidamente.
El
segundo tiempo empezó con la misma tónica y con buenos auspicios para Peñarol.
Sobre
los 5´ llega el tercer gol aurinegro. Doble pared perfecta entre Pacheco y
Aguiar (con Pacheco parando de pecho y llevando de cabecita y devolución de
taco incluida del ex Liverpool), el toque corto del capitán para Jonathan
Rodríguez que domina, apunta y saca un remate perfectamente colocado que se
clava arriba contra el ángulo superior izquierdo de Pérez para marcar el 3 a 1.
En
cualquier época, con cualquier equipo, Peñarol ganando 3 a 1 ante El Tanque es
partido liquidado. Pero este Peñarol (repetimos, de los peores de la historia)
se encarga de complicar hasta lo que es más sencillo.
Ya un
minuto después del tercero, pudo descontar El Tanque cuando desborda por
izquierda el jugador fusionado y mete el centro al medio donde entraban 3
jugadores solos y uno de ellos define mal y manda la pelota afuera cuando
estaba debajo del arco.
El
descuento llega sobre los 19´ con un tiro libre desde la derecha que es
levantado en forma de centro y Felipe le gana a Albín para meter el cabezazo que
pega en el palo derecho y se mete en el arco venciendo a Castillo. Se instalaba
ya la duda en toda la parcialidad aurinegra.
Pero
Peñarol dispuso de las suyas para volver a sacar 2 goles de ventaja.
A los
21´ un tiro libre rematado por Aguiar pasa lamiendo el palo derecho de Pérez
que se quedaba parado en la incidencia.
Un
minuto después Jonathan Rodríguez pelea una pelota contra la banda izquierda,
le gana a dos defensores, mete el freno y le pega por elevación intentando
superar al arquero que estaba adelantado y que en enorme esfuerzo consigue
rozar la pelota y mandarla al córner.
A los
25´ un cambio de frente de Aguiar para la entrada de Hurtado (que había entrado
por Pacheco) que picaba por derecha, le mete un caño a un defensor y remata
cruzado apenas ancho contra el palo derecho.
Un
minuto después un buen remate de Fagúndez se va apenas afuera contra el palo
izquierdo de Castillo.
Sobre
los 30´ llega lo impensable. Una pelota afuera, permite el ingreso del ex
aurinegro Asconeguy. Se efectiviza el saque lateral, rechaza la defensa de
Peñarol, la pelota la toma Asconeguy, avanza y saca un remate impresionante,
inatajable para Castillo que se clava contra el ángulo superior izquierdo
marcando el empate.
Todos
los fantasmas de los últimos malos resultados se instalaron en la cancha y
fuera de la misma, donde la hinchada, que había alentado sin cesar hasta ese
momento, comenzó con esos cantos de reprobación a un equipo que nos ha hecho
soportar golpes demasiado duros y ajenos a la historia y tradición del club.
Para
peor sobre los 32´ Valdez comete una falta tan fuerte como innecesaria en la
mitad de la cancha y se va bien expulsado. Algo inexplicable en un jugador de
la experiencia del mejor zaguero que hemos tenido en esta temporada que nos
dejaba con 10 en un partido más que complicado y con el que no podremos contar
en el próximo juego ante Cerro.
A esa
altura los ánimos estaban más que caldeados sobre todo en la tribuna que
reclamaba más del equipo mirasol.
Pudo
ser a los 36´ con un remate cruzado de Hurtado otra vez ingresando por la
derecha y la pelota se va apenas afuera contra el palo derecho de Pérez.
Finalmente
a los 41´ llegó el gol de la victoria. Pase profundo de Zalayeta (que ingresó
por Toledo después del empate) para la corrida de Hurtado por derecha, quien va
hasta el fondo y mete el famoso pase atrás, al medio del área que recibe Jonathan
Rodríguez y toca corto para hacer que la pelota entre despacio contra el palo derecho
marcando un 4 a 3 que sería definitivo.
Ganó
Peñarol y punto. Poco más queda de positivo de este encuentro donde por
momentos volvimos a jugar muy mal. Quizás la vuelta de Mac Eachen después de
mucho tiempo al equipo titular (mejor de lo que yo esperaba) y los dos goles de
Jonathan Rodríguez. Por supuesto, la importancia de alcanzar la punta. Pero no hay que olvidar que sufrimos enormemente para
ganarle a un equipo limitado como El Tanque, que si Peñarol tenía 12 bajas
entre lesionados y suspendidos, el equipo fusionado tuvo hoy 8 bajas.
Para
peor está la expulsión de Valdez, nuestro mejor zaguero con quien no contaremos
ante Cerro y la quinta amarilla de Albín.
Ganó
Peñarol e increíblemente está puntero del Clausura aun habiendo perdido puntos
imposibles de perder. Señal de la mediocridad enorme de este campeonato.
El miércoles
será la revancha ante Arsenal en una copa donde si bien matemáticamente aún hay
posibilidades, la sensación es que estamos eliminados. Fossati tendrá enormes
problemas para armar el equipo, sobre todo en el sector defensivo tan aquejado
por lesiones (hoy se supo que Viera deberá ser operado cuando parecía una lesión
sin entidad) y suspensiones.
El fin
de semana será el turno de enfrentar a Cerro por este campeonato del que ahora,
somos increíblemente punteros.
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