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miércoles, 22 de enero de 2014

De mal en peor.


Hoy el comentario será breve, porque hoy el partido de Peñarol fue lo de menos ante la situación vivida por algunos de sus futbolistas y también porque el juego fue tan pobre que dejó muy poco que decir.
Hoy Peñarol supo que no podrá contar por dos meses con 4 de sus futbolistas, procesados sin prisión por el bochorno del clásico anterior. Ellos son: Fabián Estoyanoff, Carlos Nuñez, Jonathan Sandoval y Washington Aguerre.
Para hacernos una idea del perjuicio al que será sometido el club por la actitud irreflexiva de estos irresponsables jugadores, basta tener en cuenta que cuando puedan volver, se habrán disputado 8 fechas del campeonato clausura.
Lo primero que hay que decir, es que se lo merecen, sobre todos los dos primeros que con su actitud irresponsable han ocasionado un nuevo perjuicio a la institución. Entendemos que Peñarol como institución debe además sancionar por su propia cuenta a estos jugadores, al menos con la quita del sueldo correspondiente a los dos meses que no podrán defender nuestra camiseta. Es lo mínimo que pueden hacer por respeto a los socios que pagan la cuota cada mes y por todos los hinchas que viven por Peñarol.
Yendo a lo específico del partido, este Peñarol parece tener la increíble virtud de jugar cada vez peor. Es increíble cómo ha cambiado el equipo en apenas unos meses desde la última consagración como campeón uruguayo.
Esta debacle iniciada por Alonso y continuada en el mismo tono por Gonçalves parece no tener fin y llevarnos decididamente a otra frustración.
Peñarol jugó muy mal, ante un equipo que consiguió un gol temprano y se limitó a defenderlo y buscar algún contragolpe.
Porque Olimpia se puso en ventaja a los 6´ cuando luego de un remate fuerte que rechazó Castillo, González tomó el rebote y la metió en un arco vacío con el arquero en el suelo.
Y ahí se terminó el encuentro, le bastó apenas eso a Olimpia para llevarse el partido ante un Peñarol lento, sin ideas, sin futbol y con muy poca rebeldía.
Como jugadas destacadas, muy pocas. Apenas un remate de Albín a los 16´ que le pegó fuerte desde afuera del área y contuvo el arquero guaraní.
A los 19´ lo tuvo Olimpia luego de que falló la zaga aurinegra que no alcanzó a despejar y el rebote le quedó a Silva que remató fuerte y pasó muy cerca de palo derecho del arco de la Colombes.
A los 24´ un centro desde la izquierda mal rechazado por el arquero olimpista, es tomado por Albín y su remate pega en un zaguero y se va al córner.
Sobre el final mismo de primer tiempo, recibe solo Hurtado por derecha y su remate cruzado se pierde afuera sin dirección.
El segundo tiempo fue más de lo mismo. Peñarol al influjo de amor propio, por momentos consiguió meter a Olimpia en su campo, pero no generó ni una sola chance digna de mención en esos 45 minutos.
Olimpia apostó al contragolpe, que no le salió casi nunca, pero tuvo la única digna de mención en el segundo tiempo. Fue a los 16´ con una entrada de González desde la izquierda, se metió al medio y sacó el remate fuerte que contuvo Castillo.
De ahí en adelante no hubo nada de peligro para ninguno de los dos, en un partido aburridísimo.
Es casi imposible destacar a alguien hoy en Peñarol. Para tener una idea, basta decir que lo más peligroso lo llevó Albín con par de remates mientras jugó de volante y un desborde cuando pasó al lateral.
El panorama a días del comienzo de la actividad oficial es hondamente preocupante. El equipo de Gonçalves no juega a nada, no genera nada, es nulo en ataque, flojo en defensa y no tiene una idea ni un patrón definido de juego.
Mucho nos tememos que estamos cometiendo nuevamente el mismo error de mantener un técnico que ya ha dado muestras de su incapacidad y su falta de visión (basta repasar cada declaración después de cada partido) para terminar removiéndolo del cargo luego de algunos partidos perdidos cuando ya estemos sin chance de nada (recordar que luego del espantoso Apertura que hicimos, esta vez la canche es casi nula).
Es preocupante la falta de visión de la directiva en este punto y lamentablemente no es la única cuestión donde le están errando. Ahora parece que han decidido que no necesitamos un lateral derecho (con lo que jugó hoy Silva en Olimpia, tendríamos que hacer cualquier esfuerzo para traerlo) y seguirán buscando un arquero. Por lo menos parece que también un delantero de área. Ahora si el nombre termina siendo Taborda, la verdad es que se entiende muy poco. Después de ver los partidos de esta deslucida copa, nos preguntamos: será muy caro traer a este Albertengo que juega en Rafaela?.
El gerente deportivo ha acompañado la falta de visión de la directiva en este punto y es el gran responsable de varios “paquetes” que nos venimos comiendo desde que asumió esa función.
En suma, al día de hoy no existe ningún elemento que nos permita ser optimistas de cara a nuestras chances futuras tanto en el clausura como en la Libertadores (sin mencionar la factura que nos pasarán la mafia de la Conmebol y la cadena internacional de deportes).
Después de estos primeros partidos de pretemporada el panorama resulta más que preocupante.

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