Peñarol ante Danubio en uno de los partidos más importantes del calendario del Apertura, sin posibilidad de dejar puntos y con la obligación de ganar. Salió al campo con dos cambios, uno obligado por la suspensión de Darío Rodríguez y otro obligado por la paupérrima actuación de Sandoval. Los elegidos para sustituirlos fueron Bizera (que pudo debutar finalmente) y Raguso volviendo al lateral izquierdo.
Comenzó
mejor Peñarol, impuso su presencia y se llevó por delante al franjeado jugando
permanentemente en su campo, aunque exponiéndose al contragolpe de los de la
curva, sobre todo a las espaldas de Albín.
A los
4´ tuvo la primera situación el carbonero. Un centro de Pacheco desde la
derecha, Zalayeta le gana por arriba al arquero Ichazo y queda para el cabezazo
de Aguiar que rebota en un defensa y se va al córner.
Responde
Danubio un minuto después con un ingreso de Ignacio González que engancha y
remata fuerte y Lerda saca abajo con una mano al córner.
A los
14 ´ la más clara para Peñarol. Un pase filtrado de Pacheco para la entrada en
el área de Aguiar que quedó cara a cara con el arquero, pero define mal y su
remate consigue tocarlo Ichazo para mandarla al córner.
A
partir de los 20´ Peñarol empieza a perder el medio campo y Danubio se hace con
la pelota y comienza a jugar más en campo mirasol.
A los
25´ un tiro libre de Lima desde el vértice izquierdo del área se estrella en el
horizontal del arco de Lerda.
A los
31´ un fuerte remate de Alvez desde afuera encuentra bien parado a Lerda que
rechaza.
Sobre
el cierre del primer tiempo lo tuvieron los dos. Primero Danubio con una pelota
que cae al área después de un córner y le queda a Quiñonez debajo del arco,
pero levanta el remate y se va afuera.
En la
recarga lo tuvo Peñarol cuando Jonathan Rodríguez baja con el pecho un centro
dentro del área y su remate rebota en un defensa y se va al córner.
Peñarol
fue mejor en los primeros 20 minutos, pero no supo aprovechar el momento y
materializar ese dominio con un gol y se expuso al contragolpe rápido
franjeado.
El
segundo tiempo empezó con los mejores auspicios. A los 3´ se puso en ventaja el
mirasol. Centro de Pacheco desde la derecha al segundo palo y remate del japo
sin dejarla tocar el piso, para meter la pelota entre el palo derecho y el
arquero.
Era
justicia porque había sido más Peñarol y merecía la ventaja.
De ahí
en adelante controlaba el partido Peñarol y no pasaba zozobras hasta que a los
21´ se le queman los papeles al árbitro Ferreira y expulsa al Japo Rodríguez
que no tenía amarilla. Condicionado por una falta que reclamó todo Danubio en
el primer tiempo, Ferreira no tuvo categoría e inventó esta expulsión que fue
determinante para el resultado final del encuentro.
Una vez
más Peñarol debía enfrentar buena parte del encuentro con un jugador de menos,
esta vez porque a Ferreira le tembló la mano frente a la presión del banco de
Danubio.
Y casi
empata Danubio en esa misma jugada porque el tiro libre lo vuelve a rematar
Lima y otra vez la pelota se estrella en el travesaño.
La
última oportunidad de Peñarol se dio a los 31´ con una pelota que guapea Albín,
la lucha y la gana dos veces y saca un zapatazo impresionante que obliga a
volar a Ichazo para sacarla al córner en excepcional atajada.
Y fue
así que lo dio vuelta el de la curva con dos goles de cabeza a los 34 y 37. En
el primero se durmió la defensa aurinegra en un córner y en el segundo se permitió
el desborde por la derecha y el cabezazo solo y de frente del delantero.
Peñarol
mejoro en su juego pero acabó con las manos vacías. Ha perdido 11 puntos de los
15 que ha disputado, ha perdido el apertura y quedará lejos en la anual, pero
sobre todo ha perdido tiempo. Porque se ha mantenido a Alonso que ha mostrado
estar verde para el cargo, cuando debió ser destituido después del partido con
Rentistas.
Ese era
el momento de cambiar al técnico y utilizar el receso que se venía para
trabajar con otro profesional, Peñarol no lo hizo y está pagando las
consecuencias.
Párrafo aparte para el mejor jugador de Danubio hoy
en la cancha: Christian Ferreira. Tarjeteó a todo Peñarol (tal es así que la línea
de fondo entera terminó con amarilla) y expulso al japo Rodríguez en una jugada
que se arreglaba con amarilla. Por otro lado dejó en cancha a Lima que tenía
amarilla y comete una burda falta contra Jonathan Rodríguez que era segunda
amarilla. Pero como no se la sacaron, metió las dos manos cortando un centro al
área y tampoco recibió tarjeta, es más, ni siquiera se cobró la mano.
Hoy cayó
Peñarol y se despidió de cualquier chance, pero hoy también fue perjudicado el
aurinegro con un arbitraje defectuoso e influenciable de Ferreira.
Veremos
cuánto tiempo más se mantiene a un técnico que evidentemente no está a la
altura del carbonero.
Bueno Adrian, ahora no queda otra que armar lo que va a ser el equipo que gane el clausura, hoy no nos queda otra opcion para poder pelear un lugar en la definicion del campeonato
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