Incapaces

En la jornada de ayer no pude asistir al encuentro de Peñarol en Jardines.Del mismo modo, no podré tampoco concurrir al del próximo viernes en el mismo escenario.

Seguramente lo mismo le ocurre a muchos simpatizantes de Peñarol que como yo tienen la suerte (desgracia en este caso) de tener un empleo.

No pude ir ayer y no podré ir el viernes simplemente porque debo cumplir con una de las obligaciones básicas de todo ser humano: trabajar.Infelizmente hay otros en este país que como no son capaces de cumplir su trabajo me privan a mí y a muchos otros de disfrutar de nuestro legítimo derecho de asistir a un partido de fútbol.

Porque la razón de que Peñarol haya debido jugar un lunes y un viernes a las 3 de la tarde no es otra que la incompetencia e ineptitud de la policía de este país que no es capaz de cumplir con su trabajo.Resulta inadmisible que la policía no sea capaz de cumplir con su función elemental de asegurar el orden público en cualquier circunstancia (incluyendo un partido de fútbol).

Resulta aún más indignante cuando todos como contribuyentes somos quienes pagamos el sueldo de esa misma policía que por no cumplir su labor, hoy nos perjudica en nuestro legítimo derecho de asistir a TODOS los partidos de futbol (o verlos en directo por Tv si decidimos no asistir) del equipo del que somos partidarios.

Es inaceptable que la policía no pueda asegurar el control de 50 estúpidos que puedan concurrir a una cancha y de esa manera se perjudique al resto del millón y medio de hinchas de Peñarol que no pueden asistir al encuentro en directo.Con ese criterio deberíamos encerrar a todas las personas de bien en sus casas y dejar que los delincuentes pululen por las calles como solución al tema de la seguridad pública.

Hace 33 años que sigo asiduamente a Peñarol por las canchas del Uruguay (y por suerte a alguna de América también) y jamás he tenido un incidente con nadie, sea cual haya sido el resultado.Por supuesto que esto no es ningún mérito, apenas me he comportado como se espera de una persona civilizada.No pretendo que me den un premio por hacer lo correcto pero si espero que por lo menos no me castiguen privándome de la posibilidad de asistir a los partidos del equipo que amo.

Infelizmente todo esto sucede por haber dejado cuestiones tan importantes en manos de quienes se han mostrado incapaces de manejarlas.Es hora de acabar con el famoso protocolo de seguridad, porque se ha probado que se dejó la organización del futbol en manos de una institución incompetente, ineficaz e incapaz como la policía de este país.

Cualquier persona normal, cualquiera de nosotros que se muestre incapaz de cumplir con nuestro trabajo, seguramente sería despedido.Del mismo modo es hora de "despedir" a la policía de la organización del fútbol, que se limiten a cumplir su función de resguardar donde se les diga que tienen que ir y dejen de tener injerencia y voto puesto que no son capaces de organizar nada.

Si no son capaces de asegurar un partido en la ciudad de Trinidad, cómo pretenden tener participación en la organización del fútbol?.Es hora que la gente normal que concurre a un espectáculo deportivo deje de pagar la ineficiencia de quién se supone que es un profesional del campo de la seguridad.Los hinchas ya no podemos ser rehenes de la ineptitud de la policía que no es capaz de controlar a 50 idiotas y hace pagar a miles de normales por eso.