Debió ser por más. Peñarol 4 San José 0

Peñarol jugaba en el CDS ante San José de Oruro en su primer partido de local en la Copa Libertadores de América. Un equipo que sumó problemas en su constitución además de los que ya traía por la ausencia de Guzmán Pereira. Lesionados Gargano y Dawson, no eran de la partida. En el arco iba Thiago Cardozo, en la zaga volvían Giovanni González y Lucas Hernández en lugar de Busquets y Rojo. Se mantenía Trindade en el medio junto con el cebolla. Eran los cambios que presentaba el aurinegro con respecto al partido con Liverpool.

Peñarol no solo debía ganar sino marcar la mayor cantidad posible de goles ante el rival más débil de la serie, que ya perdió de local con Flamengo, que es muy probable que también caiga de local contra la LDU y seguramente pierda todos sus partidos afuera. Sin dudas, el rival más accesible del grupo, que tiene como su mayor arma la altura de Oruro con la que no podría contar en esta jornada. Un equipo que perdió a su técnico en los últimos días, sustituido por el ex internacional boliviano Ramallo.

Rápidamente Peñarol mostró su superioridad porque convierte en la primera situación que creó. Iban 3´ cuando el toro mete el pase profundo para Giovanni González que va hasta el fondo, mete el centro y Viatri gana el anticipo en el primer palo y cruzar el remate al palo izquierdo venciendo el esfuerzo del arquero Lampe.

Pudo convertir un segundo tanto el argentino con un remate desde afuera del área a los 7´ que se pierde arriba del horizontal.

El segundo llega a los 23´ un córner desde la izquierda de Lucas Hernández y el cabezazo limpio, sin saltar de Lema, de pique al suelo para meter la pelota contra el palo derecho. Peñarol 2 a 0 y resolviendo temprano el trámite. Primer gol del argentino con la camiseta aurinegra.

Sobre los 31´ un tiro libre desde el vértice izquierdo del área de Lema y la pelota pasa por encima del horizontal.

A los 37´ una salida desde nuestro campo con pase en largo de Viatri para que vaya Canobbio por izquierda sin oposición, se mete en el área, engancha hacia adentro y saca el remate cruzado que roza en un defensa y se mete abajo contra la base del palo izquierdo. Era el 3 a 0 aurinegro.

De ahí hasta el final del primer tiempo, Peñarol buscó aumentar la ventaja y puso en peligro a la defensa visitante con algún centro cruzado que no consiguió rematador.

El segundo tiempo empezó de maravilla, como para alentar la goleada deseada. Porque a los 4´ Giovanni González roda una pelota en el medio y se va solo como puntero izquierdo, toca al medio para Viatri que acomoda y desde afuera del área mete el toque sutil por encima del arquero para mandarla contra el palo derecho. 4 a 0 con todo el segundo tiempo para conquistar más tantos.

Peñarol continuó acumulando chances para convertir. A los 11´ un remate del toro Fernández desde afuera del área que contiene sin problemas el arquero Lampe.

Un minuto después, tiro libre desde la derecha de Canobbio mandando al área en forma de centro, gana Lema en el segundo palo y la mete al medio y el cabezazo del cebolla que contiene el arquero.

Pero es entonces cuando, a nuestro entender, López se equivoca. Porque comienza a reservar jugadores y saca de la cancha a Viatri (por Acevedo), al cebolla Rodríguez (por Novick) y al todo Fernández (por Gastón Rodríguez).

A los 14´ un mal despeje de la defensa boliviana le queda a Brian Rodríguez dentro del área y su remate pasa por encima del horizontal.

Sobre los 18´ un toque de Brian Rodríguez para Lucas Hernández que va hasta el fondo por izquierda y saca el centro que cabecea forzado Gastón Rodríguez y atrapa Lampe.

A los 21´ Peñarol se pierde la chance del quinto. Un ingreso al área de Canobbio por derecha y lo empujan claramente, penal bien sancionado. Lo remata Gastón Rodríguez, mal, al medio, sin fuerza y rechaza el arquero boliviano. Es inentendible que fuera Gastón Rodríguez quien haya rematado ese penal. Es un jugador que no tiene condiciones ni técnicas ni anímicas como para ser quien lleve esa responsabilidad. Ya lo demostró ante Nacional en la final de la Supercopa, donde lo pateó igual de mal. No debió ser nunca quien lo ejecutara. Considerando que ya no estaban el cebolla Rodríguez, el toro Fernández ni Viatri y que Lucas Hernández la sacó del estadio contra Nacional, el candidato lógico para patearlo era Canobbio.

Peñarol ya no volvió a tener otra chance para convertir. Por su parte San José tuvo un par muy tímidas. La primera a los 26´ con un ingreso al área por izquierda y posterior remate de Alessandrini que contuvo sin problemas Cardozo contra su palo derecho.

La última sobre los 40´ con un córner desde la izquierda que se cierra peligrosamente sobre el arco, Cardozo hace vista y se va por encima del ángulo izquierdo.

Peñarol ganó y goleó y ese parece ser el objetivo principal. Sin embargo, debió ganar por más y aprovechar mejor la inusual posibilidad de marcar un score que nos pueda ayudar en una eventual definición del grupo. Será una definición muy apretada, porque seguramente a este equipo le van a ganar todos, incluso de local (Flamengo ya le ganó y LDU no siente la altura). Peñarol deberá ganar en Oruro, porque incluso un empate y ganando todos los puntos acá, lo puede dejar afuera por puntos si el resto gana sus puntos de local y LDU lo hace en Bolivia (lo que no es un resultado para nada descabellado de imaginar).

López cuidó jugadores y habrá que ver a la larga si eso fue beneficioso o perjudicial. El domingo será ante Wanderers en el Centenario, otra prueba dura para este equipo mirasol.