Toda la suerte en contra.

Da Silva no hizo ningún cambio para jugar contra Fénix, priorizando el campeonato doméstico en contra de una mayoría de la hinchada que sigue cantando por la, para algunos imposible, Copa Libertadores. Y Peñarol arrancó mejor, tenía la pelota, la jugaba con criterio ante un Fénix que paraba los ataques a base de faltas y más faltas.

Pero apenas a los 8´ se iba  dar una jugada que marcaría el rumbo del partido cuando Guillermo quiere salir jugando en lugar de reventar la pelota y permite que se la lleve Waterman por derecha, lo supera en velocidad y mete la pelota al medio y cuando iba a cerrar Costa tiene la mala fortuna que la pelota le rebote, se eleve y le dé en la mano provocando un penal tan involuntario como desafortunado.

Lo remato el ex aurinegro Maximiliano Pérez, fuerte a media altura contra el palo derecho de Gurucega que se tiró bien pero no la pudo sacar. Y en ese momento pensamos que la cosa venía mal porque cuando la suerte se nos pone en contra generalmente acabamos perdiendo.

Peñarol no se desesperó. Siguió jugando mejor que su rival, abriendo la cancha y como Fénix se cerraba atrás, apeló al remate de media distancia.

Pero pudo ser Fénix quien marcara el segundo a los 15´ luego de un mal despeje de nuestra zaga y la pelota le queda a Cantera que saca el remate que pasa lamiendo la base del palo derecho de Guruceaga.

Respondió el aurinegro a los 17´ cuando esta vez la que despeja mal es la zaga albi-violeta y Forlán, desde fuera del área, saca el remate de primera que se va apenas afuera contra el palo derecho del arquero Denis.

Sobre los 21´ el toque de Forlán al medio para el remate de Costa que hace que Denis vuele contra el palo derecho para sacar al córner.

Y a los 37´ viene el mazazo para un Peñarol que jugaba mejor. Otra vez Waterman le gana en velocidad a Guillermo que lo corrió de atrás en toda la jugada. El panameño enfrenta a Guruceaga que consigue despejar con el cuerpo, pero el rebote le queda a Ligüera que no tiene inconveniente en mandar la pelota al fondo con el arco libre. Un 2 a 0 injusto con un Peñarol que jugaba mejor pero que era un desastre defensivo.

La última del primer tiempo fue para Peñarol con otro remate de Costa desde afuera que se vuelve a ir ancho contra el palo derecho.

Un primer tiempo difícil de entender porque Peñarol jugó mejor que su rival pero se fue perdiendo 2 a 0. Un pésimo partido de Guillermo (poco ayudado por Maxi Olivera que nunca cubrió su zona y permitió que Waterman lo encarara en velocidad) y también de Aguiar que se equivocó siempre. El segundo tiempo se hacía muy cuesta arriba.

Da Silva saca a Aguirregaray coloca a Luque, dando desborde al ataque pero quedando regalado en defensa ante la velocidad de los delanteros de Fénix.

Antes del minuto pudo descontar Peñarol con un remate de afuera de Forlán, rechaza el arquero y Luque mete el centro pasado que cabecea Forlán y vuelve a atrapar Denis.

A los 3´ un pase para Forlán por derecha, engancha hacia el medio y saca el remate que revienta al palo derecho. El rebote le queda a Luque que saca el balazo y el arquero Denis despeja á córner estirándose y sacándola con una mano. Lo dicho, la suerte en contra.

Sobre los 6´ se va Aguiar por izquierda mete el centro y el cabezazo de Nandez supera al arquero y pica al lado de la base del palo derecho.

La primera de Fénix en el segundo tiempo a los 13´ con una pelota larga donde Cantera supera a Guillermo en velocidad, engancha hacia afuera para dejar de lado a Guruceaga y cuando toca la arco consigue despejar Valdez sobre la línea. Lo dicho, Peñarol atacaba pero quedaba regalado atrás.

A los 18´ va Luque de nuevo por izquierda y mete el centro perfecto en la cabeza de Affonso que había ingresado y el cabezazo del ex Racing en el área chica pega en el cuerpo de Denis y se va al córner. La suerte una vez más en contra, malogrando un gol hecho.

Sobre los 24´ es otra vez Luque el que se va por izquierda y mete el centro y esta vez Affonso se lleva la pelota por delante y la tira afuera cuando tenía todo para convertir. Una vez más, ni un poco de suerte.

La última fue a los 39´ con otro remate de Forlán desde afuera de sobrepique y vuela el arquero Denis para sacarla contra el palo derecho.

Sobre el final otro remate de Afuera de Aguiar que contiene el arquero.

Peñarol cayó ante Fénix y le dejó servida la punta de las dos tablas al tradicional rival. No jugó mal pero no ligó ni siquiera un poco después de ese penal increíble que tuvimos que sufrir.

En tres días habrá que jugar contra Huracán por esa Copa que ya tantos catalogan de imposible y el equipo llegara con el peso de esta derrota y el cansancio físico acumulado. Con una defensa que mostró que lo único que se necesita para superarla, es velocidad y un ataque que no tuvo un solo remate franco que no fuera desde afuera del área.

Será una semana complicada y el inicio de una maratón que nos dirá para qué estamos hechos por el resto de la temporada.

Arrollador. Peñarol 5 Defensor 1

Peñarol se presentaba en el Centenario en su primer partido oficial del 2016 ante uno de los rivales que en las últimas décadas nos ha traído más problemas. Para ello el técnico Da Silva decidió un único cambio con respecto a la formación que empató el jueves por la noche en Lima: el regreso de Maximiliano Rodríguez por Nicolás Freitas.

A priori se trataba de una decisión arriesgada teniendo en cuenta el viaje, el escaso tiempo de recuperación y el hecho que varios jugadores parecieron terminar extenuados al término del juego por la copa.

Defensor salió a aprovechar ese cansancio aurinegro, presionando en campo mirasol, no dejando salir cómodo desde el fondo y obligando a que los zagueros salieran con pelotazos que quedaban siempre en poder de los jugadores violetas. Pero le faltaba la otra parte, porque no generaba peligro en ofensiva y sus ataques carecían de peso.

La primera fue para el aurinegro a los 10´ con un toque largo de Costa para la entrada de Forlán por izquierda que queda mano a mano con el arquero Irrazabal pero no consigue rematar y el arquero le cierra bien el ángulo de tiro y consigue despejar la pelota.

La apertura es a los 26´ cuando el Nico Olivera (el mismo de la patada asesina contra Alejandro Silva) se tira al suelo y el árbitro inventa una falta de Guillermo que no lo toca. Lo remata Felipe Rodriguez que la clava contra el ángulo superior izquierdo de Gurucuega que voló pero que era imposible que pudiera sacar ese zapatazo. Un golazo de Defensor pero viciado de nulidad porque no fue falta contra Olivera.

Minutos después en una jugada donde Nandez va a buscar una pelota con un jugador violeta, le termina sacando amarilla comprando de nuevo una falta que no es y sumándose a la descarada campaña que los periodistas han estado armando en contra de juvenil aurinegro.

Pero eso pareció despertar a Peñarol, como si le hubieran mojado la oreja se fue yendo arriba por momentos con más enjundia que futbol pero empezando a acumular chances de convertir.

La primera es a los 35´ con un centro pasado para la entrada de Forlán, esta vez por derecha que vuelve a enfrentar al arquero que de nuevo consigue achicarle el ángulo de tiro y termina rechazando la pelota.

Un minuto después un remate desde afuera de Aguiar que contiene bien Irrazabal.

El empate llega a los 39´ con una apilada magistral de Maxi Rodríguez por izquierda y el toque atrás de taco para Forlán que domina, la acomoda y saca el derechazo que supera la estirada de Irrazabal para clavarse a media altura contra el palo derecho poniendo el 1 a 1.

Siguió dominando Peñarol después del empate y a los 43´ otro remate de Maxi Rodríguez desde afuera es contenido por Irrazabal.

Sobre el filo del cierre llega el segundo de Peñarol. Una salida desde nuestro campo. Forlán mete un certero cambio de frente para Aguirregaray que sube por derecha, mete la diagonal al medio para sacarse al marcador y saca el remate a la puerta del área que rechaza el arquero. El rebote lo toma Forlán y de primera saca el remate, ahora de zurda para que la pelota se clave contra la base del palo derecho marcando el 2 a 1 con el que se cerró el primer tiempo.

Honestamente jugó mejor Defensor pero ganaba por una jugada ilícita y Peñarol mostró la rebeldía que le pedimos a los equipos aurinegros para darlo vuelta. Había que ver que factura nos podía pasar el físico en el segundo tiempo.

Ese segundo tiempo nos sorprendió a todos porque nos encontramos con un Peñarol arrollador. Ya a los 3´ se vió la tónica de un Peñarol ofensivo cuando un centro de Forlán desde la derecha lo recoge Nandez intentando una chilena que se le va por encima del horizontal.

A los 5´ un pase largo de Valdez deja solo a Murillo contra el arquero y el línea cobra una posición adelantada increíble a un jugador que estaba habilitado por más de un metro. Como para terminar una noche pésima del arbitraje y siempre en perjuicio de aurinegro.

Cuando iban 11´ pudo empatar Defensor con un tiro libre desde la izquierda a modo de córner corto y el cabezazo solo de Rabuñal en el área chica que se va por encima del horizontal de Guruceaga.

El tercero llega a los 20´ con un tiro libre de Forlán desde la derecha que se la pone en el pie a Murillo (no fue un centro, fue una habilitación de gol) para que el colombiano la tome sin dejarla picar y la clave contra el palo izquierdo marcando el 3 a 1.

Y de ahí en más fue todo de Peñarol que fue acumulando goles. El cuarto llega a los 36´ con una salida de Albarracín por derecha, el cambio para Forlán entando por izquierda y el toque magistral del 10 para Murillo que entraba por el medio y define fuerte, arriba para dejar sin asunto a Irrazabal y poner el cuarto.

La lotería llega a los 40´. Esta vez la salida es por izquierda por Olivera que mete el centro combado que se va alejando del arco y Forlán mete el cabezazo que hace que la pelota se eleve, supere a Irrazabal y se meta arriba contra el palo izquierdo cerrando un 5 a 1 soñado.

Y pudo ser más porque sobre el cierre del partido ataca Albarracín por derecha, le mete un caño a Suarez y su remate trabado se va apenas arriba del horizontal.

El encuentro terminó con la tribuna disfrutado el juego y los goles y cantando, una vez más, por la obsesión de la copa Libertadores. Aun cuando muchos hablen de imposibles y quieran circunscribirse a la disputa del campeonato doméstico, el verdadero hincha de Peñarol sigue soñando con lo más alto y mientras tenga posibilidades, seguirá deseando ser campeón de todo.

Un partido redondo de Peñarol, como hace tiempo no veíamos (probablemente desde aquella final ante el mismo Defensor y dirigidos por éste mismo técnico). Una actuación consagratoria de Forlán, con un hattrick perfecto (uno de derecha, otro de zurda y el tercero de cabeza) y dos asistencias para dos goles (la del tiro libre fue un pase gol y no un centro).

Peñarol hizo el mejor partido del año ante el rival más encumbrado que hemos enfrentado hasta el momento, superó el mejor inicio del rival, se repuso a la desventaja de la apertura (agravada por provenir de un fallo erróneo del juez), superó un arbitraje perjudicial, no sintió para nada el cansancio del viaje y las pocas horas de recuperación y terminó goleando al rival y hasta pudiendo convertir algún tanto más.

Ahora vendrá una semana donde los jugadores podrán descansar para el sábado poder enfrentar a Fénix buscando mantener la punta del clausura y la anual.

Un punto que puede servir (o no) Peñarol 1 Sporting Cristal 1

Y finalmente llego el esperado día. El debut de Peñarol en la copa Libertadores, la gran obsesión de todos los carboneros. Era en el Estadio Nacional de Lima ante el Sporting Cristal local y Da Silva realizó un solo cambio en el equipo inicial con respecto a la formación que le ganó a El Tanque en Maldonado. El ingreso de Nicolás Freitas en el medio en lugar de Maximiliano Rodríguez, buscando una mayor solidez y recuperación en el medio campo.

Enfrente un equipo celeste donde la figura es un ex aurinegro, Jorge Cazulo e integraba el once inicial otro ex carbonero: Santiago Silva. Sumando además algunos peruanos conocidos como el arquero Penny y Lobatón.

Pero Peñarol careció de contención en ese medio campo (incluso con un Freitas cometiendo muchas faltas y dejando tiros libres peligrosos para el rival) y el Cristal tuvo siempre la pelota y desde los primeros minutos buscó el arco de Guruceaga.

Ya a los 2´ un remate desde fuera del área de Silva fuerza una gran atajada de Guruceaga yendo abajo en gran esfuerzo.

Un minuto después un pase al área desde la derecha y el zaguero Rodríguez, solo en el área chica se lo pierde tirándola afuera cuando tenía todo para convertir la apertura.

A los 6´ un centro desde la izquierda y el cabezazo de Santiago Silva en el área chica que se va por encima del horizontal.

Sobre los 10´ un peligroso remate de Costa (el peruano) por encima del horizontal de la valla aurinegra.

La tenía siempre el Cristal y generaba la sensación de que en cualquier momento se ponía en ventaja.

Peñarol apenas si respondió tímidamente a los 13´ con un remate desviado de Murillo entrando por el segundo palo y recibiendo una pelota que superó a Cazulo.

Pero un minuto después pudo ser para el Cristal cuando Calcaterra entra por derecha, engancha para sacarse de encima la marca de Olivera y remata cruzado haciendo que la pelota pase rozando el palo derecho de Guruceaga.

A los 31´ un tiro libre frontal de Lobatón (por falta de Freitas) rematado fuerte y abajo provocando otra enorme ataja de Guruceaga que se arrojó contra el palo izquierdo para mandarla al córner.

Peñarol llega a la apertura en una jugada aislada a los 39´.  Un despeje largo de Guillermo, peina Murillo de espaldas al arco para que la pelota vaya al medio, justo donde entraba Aguiar que recibe y remata cruzado ante la salida del arquero para que la pelota se meta por el medio del arco marcando la ventaja mirasol.

La última fue para el Cristal a los 44´ con un toque de Calcaterra por encima de Guruceaga que estaba adelantado y la pelota se va apenas arriba del horizontal.

Peñarol se fue ganando el primer tiempo de una forma realmente inmerecida. Fue más el Cristal y dispuso de claras chances para convertir, pero Peñarol aprovechó la única que tuvo y se retiró en ventaja. Había que aguantar el segundo tiempo.

El segundo tiempo fue como lo esperábamos. Con Cristal atacando y Peñarol aguantando e intentando contragolpear.

A los 3´ un lateral desde la derecha, se duerme la defensa y entra solo Costa que remata cruzado, la pelota supera a Guruceaga y se pierde cerca contra la base del palo derecho.

Sobre los 12´ un ataque peruano por izquierda y la pelota le queda a Lobatón que saca el remate que rechaza de nuevo Guruceaga.

A los 15´ un remate desde afuera de Costa y otra enorme atajada de Guruceaga.

Sobre los 23´ un tiro libre desde la izquierda de Ramúa que pasa apenas arriba del horizontal.

El empate llega a los 29´ con otro tiro libre de Ramúa desde la izquierda, esta vez levantado en forma de centro. La defensa aurinegra no salta y quedan solos 3 peruanos siendo el zaguero Rodríguez quien cabecea para vencer a Guruceaga.

Era justo por el trámite del encuentro y porque Peñarol jamás aprovechó los espacios que Cristal dejaba en el fondo en su afán de empatar.

Un minuto después del empate pudo ser el segundo del equipo celeste. Una triangulación por derecha y el toque para Lobatón que remata y Guruceaga vuela para sacarla contra el palo izquierdo.

A los 36´ un centro desde la derecha de Ramúa y Costa cabecea solo por encima de horizontal.

La última fue para Peñarol a los 39´ con un centro de Ifrán desde la derecha y el defectuoso cabezazo de Murillo al medio cuando tenía todo para convertir.

Mereció ganar el Cristal y no lo hizo por la gran actuación de Guruceaga. Pero también pudo haber hecho mucho daño el aurinegro si hubiera aprovechado los grandes espacios que dejaba el local en defensa. Hoy quedó de manifiesto la falta de delanteros rápidos, aptos para el juego de contragolpe. De haberlos tenido, Peñarol pudo muy bien volverse con los 3 puntos.

Peñarol se trajo un punto de Lima y por el trámite del encuentro parece un buen resultado. Habrá que ver con el desarrollo de la serie si termina siendo o no suficiente para pasar el grupo.

El segundo juego será ante Huracán en el Centenario pero ahora hay que cambiar el enfoque y pensar en Defensor el domingo en el mismo escenario.

El duro camino de la Copa

El jueves a las 21.45 de nuestro país comienza el sueño de una nueva Libertadores para todos los hinchas carboneros. Al influjo del eterno canto de la tribuna que ya en los partidos del campeonato local proclama “la Copa Libertadores es mi obsesión”. Para quien escribe, que tuvo la inmensa fortuna de ver a Peñarol campeón de América en dos ocasiones y una del mundo, el cantico no puede ser más removedor.

Somos de aquellos que sabemos que la Libertadores es muy difícil. También era difícil ganarla en los 80 y podemos dar fe de eso. Pero tampoco nos afiliamos a la postura de aquellos que creen que es imposible. No postulamos que este Peñarol esté para ganar la Copa, es imposible saberlo, como no lo sabíamos del equipo de Bagnulo en el 82, ni el de Tabárez en el 87, ni de Aguirre en 2011.

Hace tiempo que pensamos que el peor rival de Peñarol es el propio carbonero. Ningún rival ha conspirado tanto contra nuestros intereses como nuestro propio equipo. De qué Peñarol veamos en estos partidos dependerá en gran medida nuestra suerte en esta Libertadores.

La situación de arranque no es la mejor. El  cambio de técnico tardío ha conspirado contra el armado y la preparación del equipo. El nuevo técnico apenas si tiene encima un partido amistoso y dos por el campeonato y escasas 4 semanas de trabajo. No pudo armar el equipo como piensa. No dieron los tiempos para traer un punta rápido y somos de la opinión que es necesario porque el único que puede cumplir esa función en este plantel es el argentino Luque. Aunque no parece ser del paladar de Da Silva, puesto que ni siquiera será parte de la delegación que va a Perú.

Nada de eso es excusa ni atenuante y es hora de que Peñarol institución, a través de su dirigencia, comience a delinear un perfil, un método de trabajo, una hoja de ruta para alcanzar los objetivos que se desean.

Hay una frase de Aguirre que postula que con la Copa “uno se va encontrando” y tiene parte de razón, pero el primer paso es proponérselo y eso es lo que debe hacer Peñarol. Esta Copa, este campeonato que sería el 50 y la inauguración del estadio, deberían ser mojones que marquen el rumbo de un Peñarol que pueda disputar con pretensiones las copas internacionales.

El camino arranca el jueves en el estadio Nacional de Lima ante el Sporting Cristal y será fundamental sacar un resultado positivo que nos apuntale de arranque. Es perfectamente posible porque a priori parece ser el rival más accesible. Huracán es a nuestro entender, el rival a superar en la clasificación y el Nacional de Medellín aparece como un equipo superior.

Pero Peñarol deberá mejorar en mucho lo expuesto hasta ahora. Generación de fútbol, velocidad,  contundencia ofensiva y solidez en defensa, serán ítems donde el equipo deberá superarse notoriamente si desea aspirar a una buena figuración internacional.

Para ello la lista de buena fe que nos defenderá en esta copa es la siguiente:

Arqueros: Gastón Guruceaga (1), Damián Frascarelli (12) y Thiago Cardozo (27).

Zagueros: Carlos Valdez (23), Emilio Mac Eachen (4), Guillermo Rodríguez (2) y Fabrizio Buschiazzo (3).

Laterales: Matías Aguirregaray (13), Gianni Rodríguez (22), Maximiliano Olivera (15), Hernán Petryk (8), Diogo (6) y Andrés Rodales (21).

Volantes: Luis Aguiar (14), Marcel Novick (5), Nicolás Freitas (18), Nahitan Nández (25), Tomás Costa (28), Nicolás Albarracín (20), Maximiliano Rodríguez (11), Federico Valverde (16), Rodrigo Viega (19) y Hernán Novick (7).

Delanteros: Diego Forlán (10), Mauricio Affonso (26), Diego Ifrán (9), Miguel Murillo (29), Carlos Luque (24), Cristian Palacios (30) y Diego Rossi (17).

El fixture que nos aguarda nos marca:

18 de febrero | Sporting Cristal – Peñarol

1 de marzo | Peñarol – Huracán

8 de marzo | Atlético Nacional – Peñarol

15 de marzo | Peñarol – Atlético Nacional

12 de abril | Huracán Peñarol

19 de abril | Peñarol – Sporting Cristal

Como siempre, como en cada inicio de una Copa, estaremos ahí. En la tribuna cuando nos sea posible y a través de la Tv cuando se juegue de visitante. Y una vez más, seremos razonables al pensar lo difícil que es ganar una copa, pero esa razón se perderá en el momento que se dé el pitazo inicial de cada juego y con toda la pasión e irracionalidad de la que somos capaces, pensaremos que el aurinegro será el próximo campeón y no hay nadie que pueda impedirlo.